El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Ribera del Duero ha creado un protocolo de toma de muestras para pruebas de PCR a temporeros como medida de prevención de la Covid-19 durante la campaña de vendimia 2020.
La DO se suma así a la campaña impulsada por la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta de Castilla y León, que ha impulsado esta medida en toda la comunidad autónoma.
En una nota de prensa el Consejo Regulador hace hincapié en que es una medida excepcional y que no entra dentro de sus competencias específicas, que son las de salvaguardar, identificar y garantizar la calidad de los vinos elaborados por las bodegas de esta zona de calidad.
No obstante, indica que ha decidido implicarse activamente en esta campaña de control, "consciente de la excepcionalidad de la situación que ha traído consigo la pandemia" y con el objeto de ayudar a sus viticultores y bodegueros adscritos.
El Consejo Regulador será el encargado de coordinar la realización de pruebas PCR a los vendimiadores que estén trabajando fuera de la zona básica de salud donde residen.
Las tomas de muestras se harán en tres puntos de la Ribera del Duero: Peñafiel (Valladolid), Aranda de Duero (Burgos) y San Esteban de Gormaz (Soria), aunque no en todos a la vez, porque dependerá de la evolución y necesidades de la vendimia. De hecho, el Consejo Regulador ha confirmado a EFE que las primeras PCR se llevarán a cabo el próximo lunes en Peñafiel.
Viticultores y bodegueros recibirán una comunicación por parte de la denominación de origen en la que se explica todo el procedimiento, gratuito para los interesados. Serán los empleadores quienes deberán solicitar la realización de la prueba a los temporeros contratados.
La toma de muestras se solicitará vía correo electrónico con una antelación de dos días hábiles, indicando el día y el lugar en la que desea acudir a realizar la prueba.
Deberán hacérsela no sólo los temporeros llegados de otras zonas sino también aquellos que, procedentes de la propia comarca de la Ribera del Duero, vayan a vendimiar en una provincia diferente, ya que la DO abarca cuatro provincias: Burgos, Valladolid, Soria y Segovia.
El Servicio Territorial de Agricultura recogerá las muestras tomadas en dichos puntos y las trasladará al Laboratorio de Sanidad animal en Villaquilambre (León) para su análisis. Los resultados serán enviados por la Junta de Castilla y León a CMD Salud Calidad Integral, empresa colaboradora con el Consejo Regulador ribereño, quien se los comunicará a los interesados.
Esta empresa proporcionará el equipo humano necesario y lo desplazará hasta la denominación de origen, así como los viales/hisopos nasales para la toma de muestras y todo el material necesario, disponiendo unidades móviles en el caso de que se requieran.
El Consejo Regulador ha insistido en que colabora en esta iniciativa "porque es consciente de que es labor de todos los implicados hacer lo posible para que la vendimia se desarrolle en las mejores condiciones, con seguridad y sin riesgo de grandes focos".
Asimismo, insiste a sus viticultores y bodegueros en la necesidad de que se sumen a esta campaña de prevención y control. "Tenemos en nuestras manos evitar convertirnos en un escenario crítico", ha señalado el director general de Ribera del Duero, Miguel Sanz.
La DO Ribera del Duero es una de las comarcas europeas donde la vendimia se realiza a mano, no a máquina, por la edad, situación y tipo de plantación del viñedo. Esto implica que el número de temporeros de cada campaña supere los 2.000, procedentes de la propia comarca, pero también de otras comunidades autónomas, así como trabajadores internacionales que se desplazan exclusivamente desde sus países de origen para vendimiar en la Ribera del Duero.