El uso del bicarbonato sódico y la acidosis rumial en el vacuno lechero de alta producción

El mayor incremento de la producción en el vacuno de leche, requiere dietas con más enregía, con una mayor utilización de cereales y concentrados; estas dietas afectan al equilibrio entre los microorganismos del rumen que participan el la digestión de los animales. La acidez de rumen es uno de los factores que más influyen sobre el crecimiento de estos microorganismos, especialmente de las bacterias que digieren la fibra dando lugar a ácido acético, fundamental para la síntesis de la grasa de la leche; estas bacterias son muy sensibles a pH bajos. La saliva es un potente regulador del pH rumial, una dieta rica en fibra alarga los tiempos de masticación y por tanto la cantidad de saliva. La forma de presentación también influye en este sentido; la mayor segregación de saliva es producida por el heno, ensilado y pasto producen una salivación menor, y la más baja es la generada por los forrajes granulados. En animales de alta producción es imposible llegar al equilibrio entre los niveles de energía necesarios y el tiempo de masticación. El pH se dispara por no producirse suficiente saliva, que contiene el bicarbonato sódico que regulador del pH. Este bicarbonato puede ser añadido a la dieta del animal, evitando así enfermedades como la acidosis, el trastorno digestivo más común en vacuno de leche