Un agricultor en una plantación de arroz. - EL PERIÓDICO
Extremadura ha producido un total de 550.000 toneladas de maíz y 150.000 de arroz durante la presente campaña, aunque en los últimos años ha reducido la superficie dedicada a estos cultivos en favor de otros emergentes como el olivo, el tomate, el almendro o el pistacho.
El presidente de Apag-Extremadura Asaja, Juan Metidieri , ha analizado los resultados de las últimas campañas de maíz y arroz este miércoles en una rueda de prensa.
Según Metidieri, la producción de maíz, que se ha reducido en un 15% respecto al año pasado, ha sido "bastante normal" pues los problemas del maíz temprano debido a la sequía y la falta de humedad de la tierra se paliaron con los tardíos, que mejoraron gracias a las lluvias de abril, ha explicado.
De esta forma, Extremadura ha cultivado 46.000 hectáreas de maíz de las 358.000 que existen a nivel nacional, lo que la sitúa como la tercera región productora.
Sin embargo, la superficie ha disminuido a "prácticamente la mitad" y el techo de producción de 84.000 hectáreas en otras campañas, ahora se sitúa por debajo de las 50.000, ha precisado.
No obstante, en la presente campaña se ha incrementado el número de hectáreas con riego por goteo, lo que conlleva un aumento de la producción con una media de en torno a 11.500 kilos por hectárea, lo que compensa esta situación.
En cuanto a los principales problemas que afectan al maíz, Metidieri ha señalado las malas hierbas y los precios bajos, que se sitúan en 173 euros por tonelada y que, a su juicio, condenan a las explotaciones a desaparecer.
Por otro lado, la producción de arroz, que ha aumentado un 10% respecto al año pasado, ha contado con 21.400 hectáreas sembradas que sitúan a Extremadura como la segunda región productora después de Andalucía.
No obstante, la superficie de este cultivo también ha disminuido, ya que hace unos años se situaba en 28.000 hectáreas.
Metidieri ha destacado la "excelente" calidad del grano debido a las temperaturas suaves de este verano, aunque la escasez de precipitaciones durante la recolección ha afectado a la producción final.
Asimismo, ha apuntado que se debe continuar con los tratamientos contra la pudenta y las malas hierbas, para lo que cree necesario aplicar más productos que aumentan el gasto.
A los problemas de fitosanitarios se suman los bajos precios que, a su juicio, se amortiguaron con la aprobación por parte de la Unión Europea de aranceles al arroz de Camboya y Birmania.
Ahora se sitúan en 288 euros por tonelada de arroz largo y 305 en el caso del arroz redondo, por lo que la situación no es "tan crítica" como la del maíz, según Metidieri.
A preguntas de los medios sobre la campaña de la aceituna, ha asegurado que gran parte de la producción "no va a tener arreglo por mucho que llueva", aunque las plantas se recuperarán del estrés hídrico con la próximas precipitaciones.
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