Claves para mantener la calidad del AOVE en el almacenamiento

Debido a las características del aceite de oliva, que resguarda en su potencial organoléptico su principal valor diferencial, su almacenamiento debe cumplir unos requisitos cruciales para garantizar la conservación de todas sus propiedades. Sin un tratamiento adecuado, su calidad se verá mermada y deberá someterse a un posterior proceso de refinación, perdiendo la categorización virgen extra, y por tanto, valor en su puesta en el mercado. Para lograr esto hay una serie de aspectos a tener en cuenta, como son la temperatura de almacenamiento, que debe ser constante y entre los 18-20º, la iluminación que debe ser tenue, y unos depósitos de tamaño adecuado, cerrados y de un material inerte y opaco, y deben tener el fondo con una inclinación o cónicos, para que se permita un sangrado adecuado para eliminar la humedad y las impurezas