La provincia lidera el relevo generacional del campo con el 8,7% de titulares menores de 35 años Almería duplica la tasa nacional de jóvenes agricultores y ganaderos y se acerca también a hacerlo respecto a la media andaluza del 4,4%, liderando el relevo generacional del campo español y despuntando en zonas de cultivo de invernaderos. Según los últimos datos del Censo Agrario, el 8,7% de los productores almerienses tiene menos de 35 años, alcanzando el 11,3% en el Campo de Níjar y hasta un 12,3% en el Campo de Dalías , las principales zonas de cultivo bajo plástico. Se confirma que la actividad enmarcada en hortícolas intensivos sigue siendo atractiva para los jóvenes almerienses, si bien el interés por el sector primario cae en picado en otras zonas tradicionales de cultivos extensivos al aire libre, como la Comarca del Alto Almanzora con un 1,9%, o la Comarca del Campo de Tabernas con el 1,5%. «La agricultura bajo por invernadero demuestra, una vez más, que es el motor del relevo generacional en Almería, pero sigue siendo muy baja», valora Adoración Blanque, presidenta de ASAJA en Almería. «Es cierto que lideramos a nivel nacional, pero sigue habiendo una barrera de entrada para jóvenes cuyas familias no han tenido nada que ver con la actividad agrícola», ha señalado Blanque. De hecho, las claves del relevo generacional del «modelo Almería» parecen sus propias características, pequeños cultivos por parte de muchas familias que consiguen «cierto patrimonio para que la inmensa mayoría de estos jóvenes hereden la actividad agrícola como hijos o nietos, por lo que deciden seguir para adelante con mucha dificultad». Si bien ASAJA considera como positivos unos datos que demuestran el «potencial» y la «vanguardia» del sector primario almeriense, la patronal pide «seguir incentivando» y poner «énfasis en otras zonas con peores comportamientos del relevo» en la propia provincia. «Llama mucho la atención que en comarcas como Los Vélez, se vayan animando los jóvenes a la ganadería», ha dicho Blanque, «pero es fundamental que se potencien también el resto de comarcas con bajísima incorporación de jóvenes, para impulsar el relevo generacional». Desde ASAJA entienden que estos «trabajos son los que dan vida a sus habitantes y lo único que puede garantizar que se fije la población en todas las localidades del interior en riesgo demográfico», por lo que reivindican «que se sigan potenciando acciones que emanan de las administraciones para impulsar un cambio de manos que ahora mismo se hace prácticamente imposible, si no es con programas de ayuda». También desde la organización agraria COAG su secretario provincial, Andrés Góngora, ha considerado como «sueño inalcanzable» la pretensión de muchos jóvenes de sumarse a los 18.000 titulares que hay ahora mismo en Almería, «por las muchas dificultades que atraviesa ahora mismo el campo y por varios frenos que podemos resumir en cuatro: la enorme burocracia, el elevado precio de la tierra, la falta de financiación y la incertidumbre en cuanto a una renta que permita que puedan asumirse las deudas que se vayan a contraer». El responsable nacional de frutas y hortalizas de COAG, hace hincapié en la «necesidad de que el modelo agrícola siga siendo rentable y no el eslabón más débil, además del único al que se piden regulaciones de precio, cuando los excesos están en otros agentes de la cadena alimentaria». Desde el Gobierno andaluz , la Consejería de Agricultura señala que las políticas del Gobierno encaminadas a favorecer el relevo generacional «están funcionando» y aseguran que la agricultura está preparada para dar el salto a la digitalización. La administración andaluza argumentan que la «movilización de casi 300 millones de euros, con las convocatorias más atractivas de la historia», son las que «han conllevado la incorporación al campo de 4.000 jóvenes de nuestra tierra» y han permitido la mejora de los indicadores. En estos momentos, la provincia de Almería está pendiente de una nueva resolución definitiva de la ayuda a la incorporación de jóvenes a la actividad agraria, a lo que hay que sumar un plan de actuaciones dirigido a la ganadería de pequeños rumiantes. Al margen de la edad de los agricultores almerienses, Almería acabó 2022 con la menor tasa de paro y la mayor de actividad de Andalucía, según una Encuesta de Población Activa en el que el sector agrícola sigue despuntando como motor de la economía provincial.