ES Andalucía se suma a la nueva movilización para dar apoyo a todas las cooperativas del sector del aceite de oliva

Tras participar en la concentración del 29 de mayo en Jaén, ES Andalucía se suma a la nueva convocatoria de movilización para dar apoyo a todas las cooperativas del sector del aceite de oliva y concienciar acerca de los bajos precios que sufren los productores andaluces. Su vicepresidente, Juan María Cuevas, participaba este martes 18 en la reunión convocada por los sindicatos COAG Andalucía y UPA Andalucía para abordar la difícil situación que está atravesando el sector del aceite de oliva, y trasladaba su apoyo para los futuros actos reivindicativos, ya que la situación del sector y los argumentos para la movilización no han cambiado, y hasta el momento tampoco se ha concretado ninguna acción por parte de las administraciones. A la rueda de prensa y a la reunión previa también han asistido representantes de las cooperativas del sector del aceite que forman parte de la Organización de Entidades de la Economía Social Agroalimentaria, ES Andalucía , y que han manifestado su intención de secundar la manifestación del próximo 9 de julio. En este sentido, conviene destacar que Andalucía cuenta con 1,5 millones de hectáreas de olivar repartidas por más de 300 municipios y ocupando a 200.000 olivareros profesionales, que generan cada año unos 18,7 millones de jornales, de los cuales el 44% corresponde a la provincia de Jaén. En esta campaña, se están registrando precios en origen por debajo de los costes de producción, una práctica abusiva (de precios predatorios o dumping) que repercute negativamente en uno de los principales tejidos productivos de nuestra región. Actualmente, existen herramientas para evitar esta situación a coste cero para las administraciones. Precisamente, las administraciones deberían considerar esta bajada de precios "injustificada" como una cuestión de Estado y pedir la activación de mecanismos como el almacenamiento privado, cuyos umbrales de desencadenamiento automático llevan más de 20 años sin actualizarse, lo que contribuye a acrecentar la distorsión del mercado.