Vaivenes, temores y generación de valor en el vino español

Por distintos motivos, las últimas campañas vitivinícolas no están siendo fáciles para el vino español. Pero hay lecciones importantes que podemos aprender de ellas para que nos vaya mejor en el futuro. Sabemos que la progresiva generación de más valor para los vinos españoles exige más estabilidad y calidad en la producción, así como más enfuerzo en la comercialización. De los graneles genéricos a más variedades y más dirigidos a clientes finales, en vez de a otros productores y exportadores; también hacia cantidades cada vez mayores de vinos envasados, tanto en segmentos de entrada en gama como en segmentos medios; más espumosos de calidad; y también hacia una cantidad mayor de vinos de alta gama donde la presencia de España es todavía escasa y pueden, sin embargo, tirar del prestigio e imagen de todos los demás. Al final, la generación de más valor en toda la cartera de nuestros vinos y productos vitivinícolas, sobre la base del esfuerzo comercial de las marcas, es la única que permitirá pagar mejor las uvas y conseguir que la rentabilidad no venga necesariamente de producir muchos kilos, sino porque las muchas y buenas ventas de vino permitan pagarlos a buen precio