El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado esta mañana una inversión pública de 800 millones de euros en la industria agroalimentaria que serán adicionales a los 1.000 millones contemplados en el PERTE (Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica) del sector aprobado en febrero pasado. "Aparte de los 1.000 millones de euros del proyecto estratégico de agroalimentación, vamos a destinar otros 800 millones adicionales, que se van a poner a disposición del sector para la transformación de la industria, la mejora de la gestión del agua y la modernización de los regadíos", anunció durante la presentación del PERTE en el marco de la Feria Nacional del Vino (Fenavin) que se celebra en Ciudad Real. El plan está dotado con un presupuesto público de 1.000 millones de euros hasta 2023, de los cuales 400 millones se destinarán al fortalecimiento industrial del sector, más de 450 millones a la digitalización de la cadena agroalimentaria y 148 millones a proyectos de investigación que contribuyan a aumentar la capacidad productiva y la competitividad de las empresas "en el futuro", detalló Sánchez. Precisamente, el jefe del Ejecutivo ha anunciado también que la orden de bases de la primera convocatoria de ayudas que se financiarán con la línea de 400 millones de euros se publicará en la primera quincena de junio. Las bases de la primera convocatoria de ayudas se publicarán en la primera quincena de junio El PERTE fue aprobado por el Consejo de Ministros en febrero pasado con el objetivo de promover el desarrollo integrado de toda la cadena agroalimentaria a través de la digitalización de los procesos y de la incorporación de conocimiento e innovación, con el fin último de facilitar el acceso de la población a alimentos sanos, seguros y medioambientalmente sostenibles. Con esta "palanca", como la llamó Sánchez en su discurso, el Gobierno aspira a movilizar una inversión privada de 3.000 millones de euros en el conjunto del sector y a crear alrededor de 15.000 empleos directos a través de distintas actuaciones. El agroalimentario es uno de los nueve PERTE aprobados por el Gobierno desde mediados de 2021 para canalizar parte de los 140.000 millones de euros que recibirá España en los próximos siete años del programa Next Generation EU. Los otros ocho están dedicados al vehículo eléctrico y conectado, a la salud de vanguardia, a las energías renovables y al hidrógeno verde, a la economía circular, a la lengua castellana, a la industria naval, al sector aeroespacial y a la digitalización al ciclo del agua. Además, hay otros dos PERTE anunciados, para el desarrollo de la industria de semiconductores y para la economía social de los cuidados. En su discurso en Ciudad Real, el presidente no ha aclarado si los 800 millones adicionales que el Gobierno destinará al sector agroalimentación se financiarán con fondos de recuperación europeos, como sí es el caso de los 1.000 millones del PERTE. En el acto participó también el ministro de Agricultura, Luis Planas, quien destacó que España es el cuarto país de la UE en producción agroalimentaria, con 56.300 millones de euros, y el cuarto exportador de la UE y el séptimo del mundo, con 61.500 millones de euros. El ministro se mostró orgulloso de que el 4% de todas las transacciones agroalimentarias que se realizan en el mundo son productos de origen España, y de que el porcentaje de mujeres que trabajan en las 915.000 explotaciones agrarias y ganaderas haya subido del 20% al 30% en los últimos 10 años, de acuerdo con el último censo publicado por el INE este mes.