Menú Agricultura La uva tempranillo, principal variedad plantada en España, pero no en Extremadura La región, por su parte, ha encontrado en la pardina su variedad más plantada -19.735 hectáreas de blanca-, con un mercado de tinto más flojo El Ministerio de Agricultura ha dado a conocer en su informe sobre las autorizaciones concedidas en 2021 y el potencial de producción vitícola -a 31 de julio de 2021- cuáles han sido las principales variedades de uva plantadas en España. La principal, a nivel nacional, ha sido la uva tempranillo, que desbanca por primera vez a la airén. Extremadura, por su parte, ha encontrado en la pardina su variedad más plantada -19.735 hectáreas de blanca-, con un mercado de tinto más flojo. Si bien es cierto que la segunda variedad más plantada ha sido la uva tempranillo -18.839 hectáreas de tinto-, casi todas las demás variedades son blancas, como la cayetana blanca -11.842 has- o la macabeo -7.867 has-, entre otras. «Podríamos decir -explica Diego Nieto, gerente de Romale- que, aproximadamente, nos encontramos en un 75% de viñedo de blanca y un 25% de tinta». Este último, apunta, se ha ido arrancando en los últimos años. «Trabajar en tinto es más trabajoso que un viñedo de blanco. Y las producciones de blanco son de alrededor de 7.000 kg por hectárea. A veces, no se llega ni a 3.000 kg/ha en tinto. Además, la enfermedad de la yesca afecta mucho más», asegura. Catalina García, secretaria regional del Vino en UPA-UCE Extremadura y presidenta de la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (FADEMUR) en la región asevera que en Extremadura los viticultores están volviendo a la blanca. Pero ¿por qué? «Con las primeras reestructuraciones se puso de moda llevar uvas tintas. Sin embargo, como no se ha pagado mucho y tienen menor producción se han impuesto las blancas. Todo es según va marcando el mercado». García considera que no es una cuestión de meteorología ni de tierra, sino de mercado. «Sí que es verdad que tenemos variedades nuestras, como la pardina y la cayetana, blancas, que están muy adaptadas a Extremadura, son históricas. Nosotros nos adaptamos a todo en viticultura, pero no somos héroes, tenemos que vivir. Si no se paga la calidad hay que ir a producción. Es una pena, pero es así, aunque cada vez tengamos más», algo en lo que también concuerda Diego Nieto: «La calidad de los tintos esta cosecha ha sido realmente excepcional». Asimismo, Catalina García subraya que llevan «tres años en crisis» y que no pueden seguir así: «Pocas predicciones, bajos precios, sequías... Es una situación preocupante. Además de prohibiciones o trabas que parecen venir desde Europa. Hay que convencerse de que el vino es un producto alimentario», argumenta. «Calidad la tenemos, hacemos muy bien los deberes. Pero tenemos que seguir luchando y no podemos consentir estos precios. Tenemos que reivindicar que la ley de la cadena funcione y también que, cuanto antes, tengamos los precios de referencia de mercado. No podemos vender por debajo de producción». Tendencias Carnaval de Badajoz Isla de Valdecañas Coronavirus Sucesos HOY Agro En Salsa Antropía