La razón científica por la que hay tanto aire en las bolsas de patatas fritas (y no es la reduflación)

El exceso de espacio en los envases de 'snacks' ha generado debates entre consumidores y expertos, quienes analizan su utilidad para conservar los alimentos, evitar daños durante el transporte o reducir impactos ambientales Abrir una bolsa de patatas fritas y encontrar más aire que contenido puede resultar frustrante para muchos consumidores. Sin embargo, esta práctica tiene razones científicas que van más allá de lo que parece a simple vista. Aunque algunos críticos consideran que puede tratarse de una estrategia de los fabricantes, los motivos tienen una base en la conservación y el transporte del producto. Los envases de patatas fritas no están llenos de aire común, sino de nitrógeno , un gas inerte y seguro que desempeña un papel crucial en la conservación de los snacks. Según diversos estudios, el nitrógeno ayuda a prevenir la oxidación de los aceites y almidones presentes en las patatas fritas, un proceso que podría hacerlas blandas y poco apetecibles en poco tiempo. Además, este gas no tiene olor ni sabor, lo que lo convierte en una opción ideal para mantener el producto fresco y crujiente durante más tiempo. Otro argumento a favor de este inflado es la protección durante el transporte. El exceso de gas en las bolsas funciona como una especie de "airbag" , amortiguando posibles golpes y cambios en la presión atmosférica, algo especialmente relevante en productos transportados por avión o largas distancias. Sin embargo, este razonamiento no convence a todos. Alrededor del 86% de los camiones que transportan bolsas de Doritos podrían no ser necesarios si el empaquetado fuera más eficiente El fotógrafo y artista Henry Hargreaves llevó a cabo un experimento personal para analizar si el aire en las bolsas realmente protege a las patatas fritas de romperse. Según explicó a la BBC , su experiencia demostró que las bolsas con mayor cantidad de aire tendían a tener más fragmentos rotos. De hecho, concluyó que el sellado al vacío resultaba más efectivo para mantener las patatas intactas durante su manipulación y transporte. Este debate también pone sobre la mesa las implicaciones medioambientales. Hargreaves señaló que, debido al exceso de espacio en los envases, una gran cantidad de camiones se utilizan innecesariamente para transportar estos productos , lo que incrementa su huella de carbono. Según sus cálculos, alrededor del 86% de los camiones que transportan bolsas de Doritos podrían no ser necesarios si el empaquetado fuera más eficiente. Aunque la industria alimentaria defiende sus prácticas para garantizar la calidad de los productos, las críticas como las de Hargreaves abren el debate sobre la necesidad de equilibrar la conservación del producto con una mayor sostenibilidad en el transporte y la logística . Esto plantea preguntas importantes sobre cómo evolucionarán las estrategias de empaquetado en el futuro. Abrir una bolsa de patatas fritas y encontrar más aire que contenido puede resultar frustrante para muchos consumidores. Sin embargo, esta práctica tiene razones científicas que van más allá de lo que parece a simple vista. Aunque algunos críticos consideran que puede tratarse de una estrategia de los fabricantes, los motivos tienen una base en la conservación y el transporte del producto.