La nutricionista Júlia Farré desvela el alimento que aporta el doble de proteínas que el huevo

Las proteínas son macronutrientes formados por aminoácidos, cuya presencia en la dieta resulta fundamental para gozar de una vida saludable. En los últimos años, ha crecido el interés por adoptar mejores hábitos alimenticios y recurrir a suplementos nutricionales con el fin de alcanzar los niveles recomendados. Un reflejo de esta tendencia es que, en España, la compra de este tipo de productos aumentó un 5 % en 2023 y un 14 % desde 2020, según datos de la Asociación Española de Complementos Alimenticios (Afepadi). Estas cifras ponen de manifiesto un cambio en el perfil del consumidor, cada vez más consciente de la relevancia de una buena alimentación. En combinación con frutas, verduras, hidratos de carbono y grasas, las proteínas constituyen un nutriente clave para mantener una dieta equilibrada y saludable. La nutricionista Júlia Farré, en un vídeo en TikTok explica los beneficios de un fruto seco como fuente proteica. La experta explica que las pipas de calabaza es un alimento que te aporta el doble de proteínas que el huevo y que además ayuda a dormir. «Se habla mucho de las proteínas porque tienen muchas funciones en nuestro cuerpo: intervienen en todo lo que es nuestra estructura corporal, nos aportan energía y ayudan a potenciar el sistema inmunológico» y añade: «Este alimento, que tiene el doble de proteínas que los huevos, además contiene triptófano, magnesio y zinc, nutrientes que te van ayudar a descansar mejor». Proteínas diarias Las proteínas son imprescindibles para el correcto funcionamiento del organismo, pero ¿qué cantidad se debe ingerir? La norma general cifra en 0,8 gramos de proteínas por kilo de peso corporal, esto se traduce en que, en el caso de un adulto que pesa 75 kilos, necesitará unos 60 gramos de proteínas diarias. Esta cantidad de proteínas se alcanza con 1-2 raciones de alimentos ricos en proteínas, según nuestro peso. Es decir, 100-125 granos de carne o 120-150 gramos de pescado, junto con la toma de lácteos o productos de soja u otras legumbres. Cuando la dieta es baja en proteínas por diferentes motivos insalvables, es recomendable completarlo con un suplemento de proteínas. Este tipo de productos pueden consumirse en distintos formatos: polvos, barritas, snacks, entre otros.