La mitad de la producción del campo pasa por las cooperativas

La facturación del sector agroganadero supone cerca del 7% del PIB extremeño Mérida. Las cooperativas agroalimentarias aportan la mitad del valor total de las producciones agroganaderas de Extremadura y su facturación representa cerca del 7% del PIB de la región, dos parámetros económicos que, a su vez, permiten fijar la población en zonas rurales y crear oportunidades para los jóvenes. Estas consideraciones y datos fueron expuestos ayer miércoles en Mérida durante la Asamblea General Ordinaria de Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura, formada por cerca de 170 cooperativas. En esta asamblea, en la que se analizó la actividad desarrollada por la federación durante el pasado año y los proyectos de futuro, se puso en valor la relevancia social y económica del cooperativismo agroalimentario, como generador de empleo y riqueza en las zonas rurales, luchando así contra la despoblación. Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura cuenta actualmente con 166 cooperativas asociadas, de las cuales 59 son socias directas. Estas cooperativas facturaron casi 874 millones de euros en el año 2018, lo que representa un incremento de casi el 7% respecto al ejercicio anterior, si bien esa cifra aumenta hasta los 1.321 millones de euros al tener en cuenta la facturación de las cooperativas de base, con un aumento similar al compararlo con el año pasado. «Eso representa nada menos que casi el 7% del PIB de Extremadura y la mitad del valor total de las producciones agroganaderas de Extremadura», afirmaron desde la federación. Estos datos «corroboran el importante peso económico de nuestro sector en la región», explicó su presidente, Ángel Pacheco, quien aseguró que las cooperativas son «las empresas más importantes en las que trabajan y de las que viven muchas familias; en muchos casos las únicas en nuestros pueblos, donde las cooperativas son motor generador de valor y riqueza para sus habitantes». Las cooperativas asociadas suman más de 32.000 agricultores y ganaderos, lo que significa que casi dos de cada diez extremeños son socios de una cooperativa agroalimentaria. Si a ello se le suman los más de 3.100 empleos directos que generan estas mismas cooperativas, el sector aglutina el 9% de la población activa de la región.