El buen vino ya no tiene que estar hecho con uvas como la merlot, syrah, sauvignon, cabernet o pinot noir. Ni siquiera debe tener otras variedades más nacionales como la tempranillo o la garnacha. La revolución del sector del vino a nivel mundial ha provocado que otras variedades de uva menos conocidas o incluso infravaloradas encuentre su sitio y su respeto, incluso, los más aficionados al vino buscan nuevas experiencias más allá del Riojas y Riberas del Duero. Un ejemplo de este es el resurgimiento de la uva bobal, una delicia de la Denominación de Origen Utiel-Requena.
José Hidalgo, el director ténico de Bodegas Vicente Gandía, explica que esta variedad de uva es poco conocida en el sector porque realmente existe muy poco cultivo: unas 60.000-70.000 hectáreas en toda España, cifra Hidalgo. De hecho, el director técnico bautiza a la bobal como la cenicienta vinícola porque siempre ha trabajado para mejorar las características de otras variedades, pero sin una oportunidad real de mostrar las suyas propias: "La realidad es que esta variedad en el pasado se limitaba a la producción de vinos a granel para mejorar el color y el cuerpo de muchos vinos hechos con otras variedades".
Uvas de la variedad bobal lista para cosechar. Foto: Lunamarina, Dreamstime
Pablo Ossorio, consejero delegado de Bodegas HispanoSuizas, también explica que la uva bobal no ha ocupado el lugar que se merece porque había sido utilizada para hacer tintos jóvenes y vinos rosados. Sin embargo, en la última década ha comprobado como esta variedad "ha resurgido de sus cenizas y poco a poco han entrado más bodegas a elaborar vinos de calidad con al variedad bobal". En el caso de Bodegas HispanoSuizas, apuestan por las mejores condiciones de elaboración y la utilización de barricas de roble francés. Gerardo Rodríguez, gerente de la bodega Dominio de la Vega, cuenta, por su parte, que desde la bodega siempre han apostado por la variedad bobal y que desde el año 2014 han notado un aumento del interés y la oferta:: "Los vinos 100% Bobal ocupan un lugar importante en el sector vinícola, siendo reconocidos por críticos y consumidores".
José Hidalgo describe esta variedad como una uva de gran tamaño, entre 3-5 veces más grande que la Cabernet. Sus hollejos son de gran dureza y alto contenido de taninos y antocianos, responsables del intenso color y cuerpo característico en los vinos de Bobal. Estas cualidades y su potencial de guarda y crianza lo han convertido en una de las variedades preferidas por los enólogos y amantes del vino. Además, la nobal junto con la merlot y la pinot noir tiene uno de los niveles más altos de resveratrol (sustancia natural anticancerígena y cardiosaludable presente en la uva) por lo que, de forma moderada, el vino de bobal es el más recomendable para nuestra salud. "Es como un caballo salvaje, lo tiene todo, pero hay que domarla, tiene buen color, ph bajo, buena acidez, y grado suficiente, pero la elegancia de esta variedad se consigue domándola en la elaboración para conseguir el afinamiento que la distingue", asegura Pablo ossorio.
Más allá de al calidad o el sabor, otro de los factores que están impulsando la defensa de la uva bobal es su resistencia al cambio climático. Esta variedad de uva es totalmente autóctona y por tanto, está más preparada a posibles aumentos de temperatura o falta de agua. "Es una variedad que se comporta de forma excepcional en Utiel-Requena, además va a favorecer el cambio climático, porque la maduración tardía se volverá más temprana, y conseguiremos madurar la uva polifenolicamente", cuenta Pablo Ossorio.
Bobos, de Bodegas HispanoSuizas: 21,50 eruos
Bobos
Es de color rojo intenso, en su aroma resalta el roble y la fruta madura, y su sabor es lleno, graso y con paso de boca majestuoso, combinando el equilibrio del tanino elegante con buen peso de fruta y un final muy noble. Marida muy bien on carnes a la brasa, asados, guisos de carnes rojas o quesos curados. Debe servirse a 16-18ºC.
Bobal en calma, de Bodegas Dominio de la Vega: 9,45 euros
Bobal en calma
Este rojo cereza con tonalidades violáceas. Así, presenta intensos aromas a frutas rojas pero matizados por aromas con notas de vainilla, tostados y especiados. Su paso en boca es fresco, afrutado y suave. Ideal para aperitivos y tapeos, quesos poco curados, patés y foie. A la vez que es un excelente acompañante de carnes, arroces y pastas.
Bo Bobal Único, de Bodegas Vicente Gandía: 7,50
Bo Bobal Único
Es un vino moderno y elegante, de intenso color e intensa fruta, con tonos brillantes de color cereza derivados de su gran acidez. En nariz presenta una gama de frutos silvestres envuelta en finos tostados de roble. En boca los taninos son carnosos y sabrosos, con un ensamblaje perfecto entre los matices de fruta fresca y las notas de torrefacto, con un final suave y equilibrado de gran personalidad. Servir a 15/16ºC de temperatura.