GPF Capital, gestora española de capital riesgo, ha comprado la compañía murciana Frugarva, uno de los principales productores de limones en España y uno de los tres suministradores de limones de Mercadona, según han confirmado diferentes fuentes financieras a elEconomista . Esta firma se integrará en The Natural Fruit Company, una plataforma montada a finales del pasado año cuando el fondo compró la valenciana Fruxeresa y la murciana Frutas Naturales, replicando la estrategia realizada años atrás por uno de sus competidores: Miura Capital, dueño de Citric & Co. En esta plataforma, GPF participa junto a Label Investment, una sociedad controlada por Alexandre Pierron-Darbonne, uno de los principales directivos de Planasa (el mayor vivero español, en manos de Cinven) y gran conocedor del mundo agroalimentario. Con el cierre de esta operación, replican la misma estrategia empleada por Miura, que desde el año 2016 ha comprado diferentes compañías relacionadas con el mundo cítrico para crear una plataforma líder en este negocio junto con diferentes fundadores de la industria que han permanecido en el accionariado tras integrar compañías como Martinavarro, Rio Tinto y Perales&Ferrer. Además, a diferencia de GPF, Miura ha montado un vehículo de inversión específico para este sector, denominado Frutas, en el que participa también junto a la familia Gómez, fundadores de Frutas Esther, otra de sus participadas. Estas operaciones son un reflejo de cómo la industria del capital riesgo se ha lanzado con fuerza al mundo a la agroindustria española, gracias a la fragmentación del sector y a la calidad de muchas de estas compañías familiares. Inversiones dudosas A diferencia de esta nueva compañía que desarrolla su actividad en una industria relativamente estable, la cartera de participadas de GPF Capital ha sido una de las más impactadas por la pandemia del coronavirus por su importante exposición a sectores muy afectados. Desde mediados del año 2017 es accionista del Grupo Pachá ?propietario de las marcas Pachá, Lío y Destino?, dedicada al ocio nocturno, a la hostelería y a la restauración. Por ejemplo, la emblemática discoteca Pachá de Ibiza no ha abierto sus puertas en todo el periodo estival ?su gran momento del año? a consecuencia del coronavirus, dejando un importante roto en sus cuentas. Algo similar a lo que le ha ocurrido a su participada Grupo La Flauta (conformado por los restaurantes de La Flauta, Ciudad Condal, Cervecería Catalana y Vinitus en Barcelona), que han visto cómo sus ingresos se reducían considerablemente tras meses cerrados. También ha caído de forma importante la facturación de Somos, su empresa dedicada a eventos ?compuesta por la integración de Grupo EDT, Efimero y Unit Elements?, en un momento en el que los eventos presenciales se han reducido al máximo. O de Gestair, su participada dedicada a la aviación ejecutiva, entre otras.