Reflexiones acerca del futuro de los secanos y de la intensificación en especies de frutos secos

En zonas donde el cultivo de cereales está generalizado, el riesgo de despoblación es un problema creciente ligado a la falta de rentabilidad de los cultivos extensivos. Esta rentabilidad es cada vez más limitada en España, debido a su dependencia de la PAC, que ha ido disminuyendo progresivamente. La sustitución de estos cultivos extensivos por el almendro, allí donde las condiciones edafo-climáticas lo permitan, es una solución que aumenta la renta a empresas pequeñas o medianas haciendola viable. Esta sustitución sería en base a un modelo, hoy en fase de validación, que se basa en tres componentes: una copa de pequeño tamaño, variedades autofértiles de floración tardía que evite las heladas y de recolección precoz que disminuya el consumo de agua, y variedades procedentes de propagación "in vitro" (lo que garantiza el buen estado sanitario y un sistema radicular adaptado a las condiciones de secano). También la mejora genética del pistacho ha posibilitado su mejor adaptación al secano frescal, son varias las experiencias a nivel mundial que lo demuestran. La intensificación de las plantaciones frutales, con una reducción del marco de plantación que implica un aumento de la densidad, reduce el periodo improductivo aumentando la producción en el periodo productivo y da mayor eficiencia a los tratamientos fitosanitarios o fertilizantes y al uso del agua, permitiendo la mecanización y facilitando el manejo