Estrés en animales de granja: concepto y efectos sobre la producción

El estrés se origina cuando el animal se encuentra en una situación que excede a su capacidad de adaptación del organismo, sobre todo si la situación es imprevisible y poco confortable. Los factores estresantes se dividen en tres grupos: físicos, sociales y los relacionados con el manejo. Hay varias áreas del cerebro que responden a estímulos aversivos o amenazantes e interactúan entre sí. Cuantos más factores sufra un animal simultáneamente mayor será su grado de estrés. Este estrés influye negativamente en la salud y el rendimiento de los animales, volviéndose más susceptibles a sufrir enfermedades. La liberación de glucocorticoides o catecolaminas los hace más vulnerables frente a enfermedades infecciosas. También aumenta el riesgo de enfermedades digestivas durante el destete y podría tener un efecto inhibidor de la rumia en animales adultos. De igual manera, puede afectar en la liberación de oxitocina y la reducción de la fertilidad. Para reducir el estrés en animales de granja es muy importante procurar que los animales se encuentren en un ambiente tranquilo, bien alimentados y con una temperatura adecuada, especialmente en situaciones que puedan alterarlos más, como puede ser el transporte.