El sistema infalible combatir las pérdidas de suelo en olivares de montaña

El cultivo del olivo en las regiones montañosas de la cuenca mediterránea, es un modelo de actividad agrícola tradicional que actualmente, se encuentra en peligro de extinción a causa de la pérdida de suelo por la erosión provocada por la lluvias y un mal manejo del arado. Para paliar este daño, se necesita una estrategia de laboreo menos agresiva, y el mantenimiento de unas cubiertas vegetales que sean capaces de retener el suelo en épocas de lluvia. La Política Agraria Común, introdujo unas medidas para la protección del suelo incentivando a los agricultores que las ponían en práctica con una cuantía adicional en la subvención agrícola. La Universidad de Málaga, mediante imágenes tomadas por drones y aplicaciones informáticas, puede obtener e interpretar información de las fincas adscritas a las ayudas económicas de la PAC. Se pueden utilizar también imágenes por satélite, de manera que además de controlar que los agricultores cumplen con los requisitos establecidos, se pueden crear mapas de vulnerabilidad que detecten las zonas más sensibles a la erosión del suelo, gestionando varias fincas a la vez e incluso municipios enteros, con un importante ahorro de tiempo y dinero.