Defensa alimentaria: un reto para el sector agroalimentario

Actualmente, el sector agroalimentario es vulnerable frente a la contaminación intencionada, ya sea en las materias primas como en los productos procesados, por parte de criminales, o terroristas. Son las empresas las que tienen que establecer políticas de minimización de riesgos por medio de la implantación de programas de defensa alimentaria integrados dentro de los programas de autocontrol. Implantando los programas de defensa alimentaria en las empresas del sector agroalimentario, se repercutirá en un beneficio directo para la marca y producto puesto a disposición del consumidor, ya que éste percibirá un alimento como seguro, y tendrá un valor añadido frente a otros productos que no lo incluyan