Cultivo de ajo morado bajo aplicación optimizada de volúmenes limitados de agua de riego

El ajo morado, cultivado en Castilla- La Mancha, tiene valores añadidos respecto al ajo blanco, económica y culturalmente. La introducción de nuevas variedades de ajo blanco, con mayores rendimientos y menores costes de producción, dificulta la competecia del ajo morado en el mercado. En Castilla-La Mancha el ajo se cultiva mayoritariamente en regadío, la escasez de recursos hídricos de la región y el elevado coste de la energía que los sistemas de riego presurizados necesitan hace necesarias estrategias para mejorar la eficiencia del agua de riego que hagan rentable el cultivo del ajo morado. Durante las campañas de 2025 y 2016 se realizaron ensayos de campo en los que se analizó el efecto de cinco tratamientos de riego en el rendimiento y los parámetros de calidad de la cosecha en ajo morado. Los tratamientos fueron uno sin déficit y los otros cuatro del 100% (2750 m3/ha), el 90%, el 80% y 70% de las necesidades netas de riego en ajo morado para las condiciones climáticas de un año meteorológico típico. Se utilizó el Modelo de OPtimización ECOnómica (MOPECO) con la metodología ORDIL. El tratamiento no deficitario fue el que logró un mayor rendimiento, el que menos logró fue el regado con un 70% del agua requerida por el cultivo. Sin embargo, el coste de esa pérdida de rendimiento (un 17%) fue inferior al coste de la cantidad de agua ahorrada (el agua utilizada se redujo en un 43%). La metodología ORDIL es capaz de optimizar la distribución de un volumen de agua de riego previamante definido a lo largo de la campaña de riegos y lograr unos rendimientos adecuados en función del agua disponible, mejorando la productividad de agua, reduciendo la huella hídrica del cultivo y haciéndolo más sostenible