Riegos del Alto Aragón celebra la 26ª Jornada Informativa y pone una vez más de manifiesto la "necesidad" de regular el río Gállego para no perder agua que ahora va "directamente al mar".
En primer término, José Antonio Pradas, presidente de Riegos del Alto Aragón.
Javier Navarro
La 26ª Jornada Informativa de Riegos de Alto Aragón (RR.AA.) se celebra en Huesca con la propuesta del recorte de dotaciones para el regadío por parte de la Confederación Hidrográfica del Ebro ( CHE ) como telón de fondo. Se plantea una reducción del suministro de entre el 12 y el 15% a los grandes sistemas de Aragón,
El presidente del RR.AA., José Antonio Pradas , ha manifestado al respecto que la propuesta está en una fase "incipiente". "Se trata de un estudio previo de cara al cuarto ciclo de planificación, que empezará en 2027, y tiene que debatirse, analizarse y ser objeto de modificaciones" , ha señalado antes del inicio de las jornadas.
Asimismo, ha mostrado su interés por conocer "qué hay detrás de todo eso". "Se ha dicho que detrás de ese recorte hay un ahorro de 1.200 hectómetros, pero ¿ qué queremos hacer con esos 1.200 hectómetros extra que vamos a tener en los embalses? ". El presidente de la comunidad general de regantes ha mostrado sus dudas sobre la compatibilidad de la reducción de dotaciones con el incremento aumentemos la garantía del suministro. "Eso es hacer trampas jugando al solitario ", ha manifestado.
Pradas ha sido tajante al afirmar que "nosotros necesitamos aumentar la garantía del suministro con más obras de regulación , no con un recorte de dotaciones". Señalando la lluvia que a primera hora de este jueves ha caído sobre Huesca, ha comentado que "después de dos años con recortes de dotaciones, con cupos y con sequía extraordinaria en la Confederación, me parece lamentable que estemos desperdiciando esta cantidad ingente de recursos, que va directamente al embalse de Mequinenza y luego al mar".
El presidente de Riegos del Alto Aragón ha insistido en que "tenemos que ser capaces de conseguir que se regule el Gállego porque no puede ser que volvamos a otro año con más de 500 hectómetros vertidos directamente al Ebro en el punto de control de Santa Isabel para luego ir al mar". "Me enseñaron que cuando uno tiene, tiene que ser capaz de guardar para esos momentos de escasez y esa es la propuesta que tenemos que hacer", ha apostillado.
El consejero de Agricultura, Ganadería y Alimentación del Gobierno de Aragón , Javier Rincón, ha inaugurado la jornada que, bajo el lema 'Voces del Sector Agrario: demandas y propuestas', se celebra en el Palacio de Congresos de la capital oscense con la asistencia de cientos de regantes. Ha asegurado que el Ejecutivo autonómico continuará con "el apoyo a las comunidades en su modernización de regadío y el respaldo a los particulares en la modernización de explotaciones".
Rincón también ha mostrado su preocupación por la propuesta de recorte de dotaciones por parte de la CHE. "Entendemos que hay que asegurarla rentabilidad de las explotaciones y que no se pueden cambiar las reglas a mitad de partido" , ha dicho ante el auditorio. El consejero ha subrayado que hay inversiones importantes que hay que amortizar "y reducir el suministro puede poner en peligro la viabilidad de las mismas y también la producción". Por ello, ha apuntado que aunque "estamos en un momento incipiente de ese proceso estaremos muy vigilantes, intentando que Confederación considere esa postura".
La alcaldesa de Huesca, Lorena Orduna, ha resaltado que el agua "es una cuestión que nos preocupa desde el inicio del mandato". Ha recordado que en 2005, cuando la ciudad sufrió "una tremenda sequía", Riegos del Alto Aragón "facilitó que pudiera llegar desde el canal del Cinca". "Tenemos que pensar en el futuro, en el agua, que es fuente de crecimiento y escuchar las demandas y reivindicaciones del sector agrícola", ha manifestado.
La primera de las ponencias. 'La venganza del campo', ha estado a cargo de Manuel Pimentel , ingeniero agrónomo que fue ministro de Trabajo entre 1999 y 2000 y que es escritor y editor. En su intervención, ha señalado que en España y en Europa "venimos de un periodo, hasta el año 2020, en el que la alimentación fue muy barata y dejó de preocuparnos". " No valorábamos lo que producíamos y empezamos a interesarnos por el medio ambiente y hemos ido restringiendo, limitando y creando una mala imagen de la agricultura", ha resumido.
Pimentel ha explicado que esta situación fue sostenible "mientras lo que importábamos de fuera era bueno, bonito y barato". Pero con la globalización y las guerras ahora nos damos cuenta de que "lo que producimos aquí es caro y lo que viene de fuera también" . Según ha afirmado, de ahí viene la "brutal" subida de lo alimentos que hemos experimentado y que continuará "mientras estemos empeñados en limitar, castigar y restringir la agricultura" . "Es algo paradójico", ha reconocido.