Asaja y la Unión de Campesinos denuncian la «desesperación del sector» y piden tomar la calle Los ganaderos del ovino de leche, en pie de guerra una vez más para exigir un acuerdo con la industria láctea que fije unos precios justos para un sector que vive momentos de desesperación, con más de dos años y medio trabajando con pérdidas. Y es que el precio medio que perciben estos profesionales por litro de leche se sitúa en los 0,75 euros, cuando el coste de producción alcanza los 0,84. Y eso a pesar de que Castilla y León es la región de la España autonómica con mayor peso en España en este sector, ya que produce el 60 por ciento del total de la leche de oveja (300 millones de litros) del país.
Convocados por las organizaciones agrarias Asaja y la Unión de Campesinos de Castilla y León, los ganaderos se manifestarán mañana en Valladolid para reclamar la renegociación de los contratos en vigor y no seguir produciendo leche por debajo de los costes. Una protesta a la que está llamado todo el sector, incluidas las cooperativas de ovino, para defender una actividad que, según Donaciano Dujo, líder de Asaja en nuestra Comunidad, «es fundamental para el campo, ya que muchos agricultores viven de vender sus cosechas para alimentar a esta cabaña ganadera».
«Más de dos mil ganaderos en Castilla y León se están arruinando porque les resulta imposible obtener ningún beneficio, ya que los precios no permiten ni afrontar los costes de producción, y ya nos conformamos solamente con no perder dinero», advierte, por su parte, Jesús Manuel González Palacín, coordinador regional de Uccl, quien asegura que muchos profesionales están pidiendo créditos para poder alimentar a sus familias y a sus rebaños y están al borde de la quiebra. Mientras, denuncia que la industria agroalimentaria se lleva todos los años 125 millones de euros en subvenciones de la Junta sin ninguna contraprestación Asimismo, el líder de Uccl afea a la consejera de Agricultura y Ganadería, Milagros Marcos, que no haya querido publicar el estudio de costes de producción al que se comprometió, y reclama que «deje de marear la perdiz y de ponerse de perfil» y cierre un acuerdo de precios con la industria láctea.
De la misma forma, Donaciano Dujo advierte de que si se mantiene la situación actual, la industria del queso y del lechazo en Castilla y León corre también un serio peligro, con el consecuente impacto que tendría para en el turismo. «No es posible pagar precios justos cuando se está vendiendo el kilo de queso de oveja a cinco o seis euros, un valor ruinoso al que no debe comprar la industria ni la distribución, ni el consumidor», denuncia.
Milagros Marcos garantiza el acuerdo
Tras conocer la convocatoria de la protesta, la consejera de Agricultura y Ganadería, Milagros Marcos, pedía ayer tranquilidad al sector del ovino de leche, al que trasladaba que cumplirá su palabra e impulsará un acuerdo con la industria para reducir los costes. «Nuestro objetivo es asegurar contratos de al menos un año con los ganaderos», destacaba Marcos, quien, pese a todo, recordaba a los ganaderos del ovino que en Castilla y León al menos no se ha dejado de recoger leche en las granjas como sí ha ocurrido en otras Comunidades.