Las cabras vuelven a Biescas para controlar la vegetación

El consistorio ha decidido repetir por tercera vez esta particular y barata manera de desbrozar la ladera, de una forma ecológica, sin ruido y sin contraindicaciones. Laura Zamboraín Las cabras pirenaicas ya están en la localidad. Ayuntamiento de Biescas Por tercer año consecutivo, un grupo de cabras pirenaicas serán las encargadas de controlar la vegetación de la calle de El Tinte de Biescas . Tras la buena experiencia de los dos últimos años, el consistorio pelaire ha decidido repetir esta particular y barata manera de desbrozar la ladera, de una forma ecológica, sin ruido y sin contraindicaciones. Además, las doce cabras pirenaicas de la ganadería de la Borda Matías de Orós Bajo, ya se han convertido en un elemento más del paisaje y un aliciente más para la gente que pasea por esa zona. Estarán en la ladera hasta el mes de julio. El alcalde de Biescas, Luis Estaún ha subrayado que se ha demostrado la eficacia de las cabras, manteniendo limpio el entorno de hierbas y vegetación, y además se ha estimado que este trabajo ahorra a las arcas municipales unos 3.000 euros al año en materia de desbroce. También hay que tener en cuenta que se trata de una zona "técnicamente complicada y supone un riesgo para las personas", al tratarse de una ladera muy pronunciada, peligrosa y extensa. La idea es mantener esta original y barata forma de controlar la vegetación. Hace tres años se realizó una inversión en colocar un pastor eléctrico, un abrevadero y un vallado , "para evitar también desprendimientos que se habían producido en esa zona y que habían dañado algún vehículo", añade el primer edil. Y de esta manera también se delimita el entorno para los animales y se establece un manejo sencillo para el ganadero. Estos trabajos los llevó a cabo la brigada municipal y el taller de empleo Alto Gállego. Ahora, la brigada se encarga de suministrar agua a las cabras. "Estamos muy contentos con el resultado" , concluye Estaún. Destacado La Feria de la Primavera de Biescas vendió 1.100 kilos de miel