La industria agroalimentaria, motor de la economía regional

Por Álvaro Guillén , presidente de Landaluz (Asociación Empresarial de Alimentos de Andalucía) La industria agroalimentaria es eje fundamental para entender la economía andaluza, y así se desprende de sus datos. De esta forma, destaca que más del 20 por ciento del empleo que se produce en Andalucía esté vinculado a esta industria, superando los 180.000 empleos y con una facturación superior a los 11.000 millones de euros, de los cuales, estamos orgullosos de representar más de la mitad en Landaluz, Asociación Empresarial de Alimentos de Andalucía. Estos datos son muy interesantes y nos sirven para saber de qué salud goza nuestro sector, lo cual no debe hacer sino impulsarnos a mejorar en otras vías de proyección. En este caso, por nuestra responsabilidad con la sociedad y porque así nos lo demandan también nuestros consumidores, estamos impulsando cada vez más los productos saludables que permitan una dieta más equilibrada de la población y que generen bienestar. Durante los últimos años se ha trabajado mucho en este camino, y sin duda, es un compromiso y un reto de la industria agroalimentaria seguir trabajando en esta dirección. Es cierto que cuando se producen estos giros en el modo de consumo de la población, se plantean nuevos retos y oportunidades para los productores. De esta forma, y aunque ya muchas empresas vienen desarrollando productos bajo esta etiqueta "saludable", sin duda nos queda mucho recorrido por hacer. Otros conceptos que también se van adaptando al nuevo perfil del consumidor es su concienciación del impacto en el medio ambiente, apostando por materiales sostenibles y que tengan el menor impacto posible en nuestro entorno lo que, sin duda, hace que no dejemos de trabajar y de evolucionar en nuestra producción, y ello se ve traducido en el constante lanzamiento de nuevos productos al mercado. En los últimos tiempos a este entorno cambiante se han unido circunstancias geopolíticas que afectan enormemente a nuestra industria como la ola proteccionista o el Brexit. Sin duda, al esfuerzo del sector por superar esta coyuntura se debe unir el apoyo decidido de la Administración por todo lo que supone para nuestra economía. En conclusión, estos y otros que se puedan dar son los retos más inminentes que deben ser asumidos por la industria agroalimentaria como oportunidades para seguir siendo un sector sostenible, motor de la economía de Andalucía.