Entre las medidas, un Plan de Reestructuración de las Plantaciones de Frutales, la modificación del PDR y planes anuales de choque
PALMA DE MALLORCA, 24 (EUROPA PRESS)-
La Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca ha hecho llegar este martes a las organizaciones agrarias las primeras propuestas de fomento del sector, afectado por la bacteria Xylella fastidiosa, que han surgido de la Mesa de Seguimiento de Xylella y de las mesas sectoriales de viña, frutos secos y olivar, a fin de que se puedan acabar de consensuar.
Asimismo, la Conselleria ha comunicado de manera formal que el 19 de octubre la Unión Europea aprobó la propuesta de modificación de la Decisión de Ejecución de la Comisión, sobre medidas para evitar la introducción y la propagación de Xylella fastidiosa, que reconoce como infectado todo el territorio de Baleares.
Por lo tanto, se tienen que aplicar las medidas de contención y el Estado miembro, de acuerdo con las propuestas de la Comunidad Autónoma, tiene que definir las especies aceptadas para la plantación, según informa el Govern en un comunicado.
MEDIDAS PARA MINIMIZAR LOS EFECTOS DE LA BACTERIA
Entre las medidas de fomento planteadas para minimizar los efectos de la bacteria se prevén un Plan de Reestructuración de las Plantaciones de Frutales, una modificación del Programa de Desarrollo Rural (PDR), una aportación estatal a la prima de frutos secos de cáscara y planes anuales de choque con tratamientos fitosanitarios, además de la ampliación de la red de fincas colaboradoras para continuar la investigación y la experimentación empezada por la Conselleria.
El Plan de Reestructuración de las Plantaciones de Frutales, destinado a plantaciones de almendro, algarrobo, albaricoquero, higuera y olivo, recoge una ayuda anual, para el año 2018, de un millón de euros proveniente del impuesto del turismo sostenible, aunque esta cantidad se puede ampliar según la demanda. El objetivo es conseguir entre 4.000 y 6.000 hectáreas de nuevas plantaciones.
El Plan, con el objetivo principal de conseguir una reestructuración ordenada y gradual de las plantaciones de fruteros, se define a diez años. Así, la Conselleria apunta a la "necesidad de disponer de material suficiente para abastecer la demanda y haber generado los conocimientos suficientes sobre la bacteria y las variedades resistentes, de manera que se tome la mejor decisión posible en cada caso".
Estas ayudas se tienen que vincular al cumplimiento de la guía Buenas prácticas agronómicas para la prevención de Xylella fastidiosa, publicada por la Conselleria.
INVERSIONES EN PLANTACIONES DE FRUTOS SECOS
Con respecto a grandes inversiones en frutos secos que se puedan llevar a cabo en explotaciones, se modificarán la intensidad y los criterios de selección de la medida 4.1 Inversiones en Explotaciones Agrarias, del Programa de Desarrollo Rural.
Esta modificación permitirá que las inversiones relacionadas con nuevas plantaciones de frutos secos puedan llegar al 60% de intensidad en la financiación y que los criterios de selección de proyectos consideren prioritarias estas inversiones.
Por otra parte, la ayuda de la PAC a los frutos secos era cofinanciada los últimos años con una parte proveniente de la Unión Europea (unos 53 euros/ha, 1.000.000 euros en total), una parte proveniente del Estado (unos 9 euros/ha, 170.000 euros en total) y una parte proveniente de la Comunidad Autónoma (unos 18 euros/ha, 380.000 € en total).
El mes pasado el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente comunicó en la Conselleria que no pagaría su parte de la PAC de 2016 correspondiente a la ayuda nacional de frutos de cáscara.
Por eso, y vistos el contexto actual de debilidad del sector y los problemas derivados de la Xylella, la Consellería se hará cargo de la parte de la ayuda de frutos secos que corresponde al Ministerio, unos 170.000 euros, además de los 380.000 euros que cada año asume con presupuesto propio.
Los planes anuales de choque para tratamientos fitosanitarios (convencional/integrada y ecológica) contra los vectores para la protección de los cultivos son otra de las medidas que prevé la Consellería para la primavera de 2018, con un presupuesto estimado de 168.532 euros.
Para llevar a cabo este tratamiento, y también otros, se harán los ensayos siguientes en nuevas fincas colaboradoras, con un presupuesto estimado de 30.000 euros.
Estas medidas se tienen que acabar de consensuar con el sector en los diferentes espacios de discusión que se han creado con esta finalidad.