La producción llegará a los 2,5 millones de kilos en 2022, con una superficie cultivada de medio millar de hectáreas CALASPARRA (MURCIA), 14 (EUROPA PRESS) El cultivo de arroz de Calasparra (Murcia) ya ha comenzado a experimentar los avances introducidos por ArrozInnova, que consisten en la siembra mecanizada y la germinación de planta en vivero especializado, con el fin de mejorar la productividad en un 25 por ciento y reducir a la mitad el uso de fertilizantes. El consejero de Agricultura, Antonio Luengo, ha explicado que "la innovación al servicio de la excelencia es la apuesta de la Denominación de Origen Arroz de Calasparra para subrayar su identidad, su singularidad y la calidad de un producto competitivo y de referencia en los mercados nacionales e internacionales". Con estas palabras, Luengo ha descrito el trabajo que se lleva a cabo en los cotos arroceros de la mano del Grupo Operativo ArrozInnova, durante su visita a los trabajos de siembra que se llevan a cabo en el término municipal calasparreño, según han informado fuentes de la Comunidad en una nota de prensa. El titular de Agricultura ha recordado que el proyecto de ArrozInnova pretende mejorar la productividad y la calidad de los cultivos en un 25% y reducir en un 50% el uso de fertilizantes, "de modo que se aúnan la sostenibilidad ecológica y la económica, pero también la social, porque la actuación que se desarrolla beneficia en gran medida a medianos y pequeños agricultores y productores del coto arrocero". El proyecto 'Innovación y sostenibilidad en el cultivo del Arroz DOP Calasparra' contempla una serie de acciones como el trasplante mecanizado y su comparación con el método tradicional de siembra, que ya se ha puesto en marcha en esta campaña; la optimización del abonado; la incorporación de técnicas innovadoras en el manejo integrado de plagas; o la puesta en marcha de una plataforma de recogida y almacenamiento de datos del coto arrocero que permita proporcionar información de manera directa en la trazabilidad del cultivo del arroz de la Denominación de Origen Protegido Calasparra. El consejero ha explicado que "sin innovación y sostenibilidad no hay futuro, y tanto la Denominación de Origen como el Gobierno regional estamos comprometidos con esa idea, pero no sólo como un enunciado, sino como algo que ya se traduce en hecho concretos para avanzar en la defensa y proyección de presente y de futuro de uno de nuestros productos estrella y una de las señas de identidad en el campo agrícola de la Región de Murcia". El proyecto cuenta con la colaboración de distintas empresas y organismos, como el Centro Tecnológico Nacional de la Conserva y Alimentación (CTC) y el Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Medioambiental (IMIDA), y con una subvención que supera los 165.000 euros, cofinanciada por la Comunidad y los fondos europeos FEDER. El proyecto se desarrolla en cuatro parcelas experimentales con siembra mecanizada y germinación de planta en vivero especializado, nuevas técnicas "que se conjugan con el respeto a la tradición de un cultivo secular". Además, la DOP y ArrozInnova trabajan en potenciar los subproductos agroalimentarios derivados del cultivo y procesado del arroz, como la cáscara o la paja, para su aplicación en sectores específicos como el envasado o como fuente de sustratos fertilizantes y de energía con carácter renovable, "lo que incide en un aprovechamiento máximo del cultivo y una economía circular", ha incidido el consejero. Asimismo, Luengo ha precisado que "la implicación de la Comunidad Autónoma se manifiesta también en las ayudas a la DOP, que el pasado año alcanzaron los 86.400 euros, y los servicios de enorme importancia que presta el Servicio de Sanidad Vegetal, con actuaciones en el coto para la eliminación de los problemas fitosanitarios y la introducción del método de confusión sexual contra el barrenador del arroz en un territorio de 500 hectáreas". Conforme a las estimaciones de la DOP, la producción de arroz llegará a los 2,5 millones de kilos este año, con una superficie total cultivada que alcanzará las 500 hectáreas. Estas cifras mantienen el nivel alcanzado en los últimos dos años, tras un incremento de un 20 por ciento producido por el aumento del cultivo ecológico.