Apag Asaja reprocha a la Junta que «haya cambiado reglas de juego» en la reconversión de viñedos

La organización profesional agraria APAG Extremadura ASAJA ha reprochado a la Junta que «haya cambiado las reglas del juego en mitad del partido» con la reestructuración y reconversión de viñedos, y se «imposibilite realizar la declaración y solicitud de arranque en la misma campaña». Según ha asegurado, la «incompetencia» de la Junta va a «costar caro a los agricultores» que opten por esta ayuda, ya que el decreto del pasado 2 de agosto «no permite el arranque para reestructurar viñedos a aquellos agricultores profesionales que no hayan realizado declaración de cosecha de uva en campañas anteriores». Un matiz «indispensable» para solicitar el arranque que «no se contempla» en la orden publicada el pasado mes de febrero, de la convocatoria de ayudas para apoyar las medidas de reestructuración y reconversión del viñedo en Extremadura en el marco del Programa Nacional de Apoyo al sector vitivinícola 2019-2023 . APAG Extremadura ASAJA ha insistido en que con el anterior decreto, el agricultor tenía la posibilidad de hacer la declaración de cosecha y solicitar el arranque en la misma campaña, hasta el 31 de octubre. Sin embargo, con el decreto en vigor, la declaración de cosecha debe realizarse antes del 1 de agosto, lo que «imposibilita realizar la declaración y solicitud de arranque en la misma campaña», provocando que «muchos no puedan beneficiarse de la ayuda, al no cumplir con los requisitos para llevar a acabo el arranque». Para la organización, es «cuanto menos sorprendente» que la Junta haya publicado una orden antes que adaptar el Real Decreto a la comunidad, lo que demuestra «ineptitud y ganas de provocar trastorno a aquellos que con el arranque pretenden emprender su futuro con la reestructuración de viñedos». A su juicio, en lugar de actuar con «coherencia y celeridad», adaptando automáticamente el Real Decreto a la región, «la Junta ha preferido dormirse en los laureles y lo que es peor, publicar el decreto un año después». La organización confía en que la Consejería «entre en razón y no penalice a aquellos que se vayan a ver afectados por la lentitud de la Administración autonómica», pues esto sería «un error mayúsculo». Y ha subrayado la importancia de dar luz verde a los viticultores afectados para que puedan volver a solicitar la ayuda el próximo año.