La intensificación sostenible como respuesta al pacto verde de la Unión Europea, retos y ejemplos en la producción frutícola y en el consumo alimentario

El artículo aborda los aspectos más importantes del "Pacto Verde" de la Unión Europea, en cuyo centro está la estrategia "De la granja a la mesa" (Farm to Fork, F2F). El objetivo es alcanzar una mayor sostenibilidad de la cadena alimentaria, desde el productor al consumidor, con implicaciones directas a los productores. Esta sostenibilidad, económica y medioambiental, se pretende alcanzar con una mayor eficiencia de los insumos, el incremento de la producción ecológica y el fomento de la biodiversidad, gracias a la aplicación de eco-esquemas como base de ese tránsito a una Europa más verde. El sector productivo deberá seguir aplicando innovaciones tecnológicas para conseguir una agricultura cada vez de mayor precisión. Eficiencia y sostenibilidad pasan por la intensificación, como vemos en ejemplos en frutales y en olivo. La Comisión Europea considera urgente la transición hacia sistemas alimentarios sostenibles para lo que establece cuatro objetivos concretos: reducción de plagicidas químicos en un 50% de 2020 a 2030; reducción en el uso de fertilizantes en un 30% en el mismo periodo; incremento de la superficie cutivada en producción ecológica del actual 9% al 15% en 2030; revertir la pérdida de biodiversidad. En este contexto se sitúa la agricultura intensiva sostenible, que se apoya en la tecnología; la "intensificación sostenible" postulada hace ya una década por la FAO. Por último, se dan referencias con respecto a las tendencias de consumo alimentario en el horizonte 2050, con una importancia creciente de la alimentación saludable y el incremento previsible del consumo de proteínas de origen vegetal