Icpor, compañía española independiente especializada desde 2012 en la integración porcina de cerdo blanco e ibérico, asegura que su modelo de negocio se basa en la apuesta por las granjas de última generación y un modelo de desarrollo sostenible, cumpliendo la normativa española.
Granja de porcino de Icpor.
EUROPA PRESS
El gerente de Icpor, Julián Redondo, ha visitado este lunes la granja de madres de Cubo de la Solana, en la que el olor es inexistente y donde ha insistido en que su compañía no apoya el modelo de macrogranjas, prohibido y limitado a capacidad por ley desde el año 2000. Esta compañía impulsa granjas inteligentes totalmente controladas tanto en alimentación y sanidad como en bienestar animal.
La granja de cerdas reproductoras y selección genética de Cubo de la Solana (Soria), modelo de granja de madres de Icpor, está operativa desde marzo de 2017 y supuso la inversión de 6,3 millones de euros. Tiene capacidad para 2.685 madres con su reposición y destete y actualmente da trabajo a unas 60 personas, entre empleos directos e indirectos. Los lechones están allí cerca de 60 días, 28 con la madre y el resto en destete.
Cuenta con seis áreas específicas e independientes (cada una de ellas en una de las naves) destinadas a cada proceso que garantizan el máximo control y seguridad en la cadena de producción: área de producción de cerdas reproductoras, área de primerizas, área de cubrición control, área de gestación confirmada, sala de partos y área de destete.
Los animales de esta granja madre tienen un control veterinario permanente, trazabilidad del proceso productivo, zona de baño y relajación y alimentación individualizada con registro y análisis a través de un chip.
Los nutricionistas reparten la composición y la frecuencia de ración gracias a un sistema automatizado en los comederos que, a través del chip, comprueba si el animal ha tomado o no su ración diaria. De ser así, el animal saldrá directamente del comedero sin poder probar más pienso.
CENSO DEL SECTOR PORCINO
Soria cuenta con 438.196 animales censados, o lo que es lo mismo, 42,51 por kilómetro cuadrado frente a los 362,2 con los que cuenta Lérida, la principal productora de porcino.
Uno de los principales inconvenientes de este tipo de explotaciones es la opinión popular, especialmente en zonas turísticas. En este sentido, el gerente de Icpor ha insistido en que no es incompatible sino que "está demostrado" que el turismo crece en mayor medida en las zonas en las que aumenta el censo del porcino. Así, en Soria, de 2013 a 2017 el censo porcino creció un 9,9% mientras que el turismo creció casi un 36%.
A nivel nacional, el sector porcino da empleo en España a más de 1,3 millones de personas, es el tercer productor mundial comercializando sus productos en más de 130 países y su volumen de negocio en 2017 fue de más de 15.000 millones de euros, representando el 37% de la producción ganadera.
Una tercera parte son exportaciones y Europa absorbe el 70% de las ventas, principalmente Francia. China es el segundo mercado.
El consumo de carne de cerdo se situó en 2017 en 10,6 kilogramos a los que hay que sumarles 8 kilos en jamón (uno por persona aproximadamente al año).
ICPOR
Icpor nace en 2012 como integradora porcina de cerdo blanco e ibérico respondiendo a la actual demanda de productos cárnicos derivados del cerdo de manera sostenible, controlada y con los estandartes de calidad y cuenta con Incorlopsa y Copiso como accionistas de referencia. En 2017 facturó 77 millones de euros y da empleo a 200 personas.
Julián Redondo ha señalado que cumple con el triple objetivo de "generar riqueza, crear empleo y fijar población en el medio rural y ha recalcado que no promueven "macrogranjas" y cumplen con la normativa española en aspectos "sanitarios, medioambientales y en bienestar animal".
Una de las características más llamativas es la ausencia de olores, uno de los temas peores vistos en este tipo de explotaciones. Para ello, utilizan un modelo de aplicación del purín con tapado instantáneo o inyección, separan el purín líquido del sólido si es necesario y se adecuan a los tiempos reales de las siembras evitando fechas sensibles.
Asimismo, cuentan con valsas de almacenamiento del purín de hormigón e impermeabilizadas, con capacidad para el menos 6 meses (el doble de la normativa) y con creación de pozos testigos mientras que no contaminan el suelo ni los acuíferos. En el caso de Cubo de la Solana, los purines los gestiona un agricultor de la localidad.
En cuanto al empleo, a medio plazo, prevé crear unos 3.500 empleos, entre directos e indirectos, en Castilla-La Mancha y Castilla y León.
La compañía no tiene previsto instalar más granjas porcinas en la provincia de Soria a corto y medio plazo.