Aragón, donde la acuicultura se hace mayor
EN COLABORACIÓN CON Acuicultura de España
Aragón, donde la acuicultura se hace mayor
Como referente en el sector, la Comunidad no solo es una gran tierra fluvial, sino también una autonomía puntera en I+D+i. Instituciones como el Instituto Agronómico del Mediterráneo de Zaragoza llevan décadas trabajando en este ámbito para lograr condiciones más sostenibles y que respeten el bienestar animal.
NOTICIA
CONTENIDO DE MARCA
La Comunidad cuenta con unos recursos hídricos notables, más allá de los ríos, entre los que se incluyen cuatro decenas de embalses de gran capacidad.
Con casi 48.000 kilómetros cuadrados de cuencas fluviales, debido al paso de los ríos Tajo y Ebro -solo este último cuenta con casi una veintena de afluentes-, Aragón es tierra de agua dulce. Y también de acuicultura, porque allí donde hay un curso fluvial, esta actividad se termina por asentar. Hablamos de la producción de pescado para consumo humano mediante técnicas sostenibles, que no solo procura un alimento de calidad y saludable, sino que favorece que sea asequible para todos los bolsillos . Además, la acuicultura usa el agua, pero no la gasta, ya que la devuelve a los ríos. A su alrededor, se propagan empresas de distinta índole, desde las más punteras en investigación, hasta centros de formación, distribución, tecnología o supervisión de peces.
En los orígenes del sector, que hunde sus raíces en el siglo XIX, los aragoneses tienen mucho que decir. Resulta que el primer vivero de la edad moderna se instaló en el río Piedra, donde los monjes católicos empezaron a cultivar su propia trucha. A partir de ahí, este pescado, junto al esturión, se haría protagonista de un mercado boyante que no ha dejado de crecer hasta el presente. Porque la Comunidad cuenta con unos recursos hídricos impresionantes, más allá de los ríos , entre los que se incluyen cuatro decenas de embalses de gran capacidad, como el de Mequinenza. La mayoría, situados al norte, cerca de los Pirineos, por lo que el agua procede de manantiales próximos y es de gran pureza.
El IAMZ nació hace casi 60 años y ha capitaneado un proyecto internacional sobre la dorada y la lubina de 7,5 millones de euros
En estos ríos fríos crecen tanto la trucha como el esturión, del que se extrae el caviar. Al tratarse de una especie muy amenazada, solo se permite la exportación de caviar producido a partir de esturiones cultivados en viveros , que se sitúan en las propias aguas fluviales y donde los peces son atendidos por personal especializado. A menudo, permiten que pequeñas localidades de interior generen nuevos puestos de trabajo, como es el caso de Oliván, Sarrión o El Grado.
Según los datos de 2020 de la Asociación Empresarial de Acuicultura de España (Apromar) , el sector español produce tres toneladas de caviar al año. La trucha, por su parte, se cultiva en enclaves como Sarvisé y Villanúa, a las faldas de las grandes montañas oscenses; Albarracín y Pitarque, en Teruel; o Río Piedra, en Zaragoza. Se cultivaron 455 toneladas de trucha arcoíris en Aragón en 2020 , más de un 3% del total nacional. Esta producción es constante durante todo el año, lo que permite ofrecer un pescado de calidad a un precio asequible mientras se protege el medioambiente, porque el cultivo evita la sobreexplotación de mares y ríos.
El futuro está aquí
No es una frase hecha. El futuro de la acuicultura está en Aragón, pues la capital es la sede del Instituto Agronómico Mediterráneo de Zaragoza (IAMZ), que fue creado en 1969. Constituye una de las cuatro instituciones que dependen del prestigioso Centro Internacional para Estudios Agronómicos Mediterráneos Avanzados (Ciheam, por sus siglas en inglés), junto a las que están situadas en Bari (Italia), Montpellier (Francia) y Chania (Grecia). Esta organización se fundó en París, hace más de cincuenta años, bajo los intensos auspicios del Consejo de Europa y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Su misión es fortalecer el espíritu de cooperación internacional a través de posgraduados y educación técnica en pos de la investigación dentro de las áreas de agricultura, alimentación, recursos naturales y acuicultura en países mediterráneos. En concreto, el IAMZ cuenta con hasta ocho másteres, junto a otras tantas universidades españolas , así como multitud de cursos de especialización de una semana. En los últimos cincuenta años, han ofrecido hasta 350 de distintas modalidades, incluidos varios sobre acuicultura y gestión de recursos hídricos.
La FAO señala en su último informe que la acuicultura es sostenible y tiene un gran potencial para alimentar y nutrir a la creciente población mundial.
Además, el IAMZ se encargó de coordinar un proyecto internacional, llamado MEDAid, que sigue las siglas en inglés de Desarrollo Integrado de Acuicultura Mediterránea. Terminó en 2021, tras cuatro años y medio, y contó con una inversión de 7,5 millones de euros. El objetivo era aumentar la competitividad y la sostenibilidad del sector acuícola en el Mediterráneo , sobre todo en lo referente al cultivo de dorada y lubina. Entre las conclusiones del proyecto, figura una sobre la que ya trabajan los viveros de toda España: "Mejorar los cultivos para aumentar la frescura, lo que está directamente relacionado con que el pescado sea más jugoso, de carne más blanca y desprenda menos agua al cocinar".
Con 48.000 kilómetros cuadrados de cuencas fluviales y cuatro decenas de embalses, la acuicultura es importantísima en la Comunidad
A este respecto, Aurelio Ortega, jefe de Acuicultura del Instituto Español de Oceanografía, explica que los viveros nacionales persiguen, de forma incesante, mejoras en la salud de los peces y en la gestión de su alimentación. "La idea es que se les administre la comida justa para evitar que sobre" , comenta Ortega. Por ende, varias empresas de Aragón ya se encargan de mejorar esta gestión mediante inteligencia artificial.
Queda claro que la acuicultura genera tejido social y económico, pero también cabe valorarla como puntal ambiental y elemento esencial en el esquema de la alimentación mundial, como afirma la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). En el último informe mundial sobre pesca y acuicultura (Sofia, por sus siglas en inglés), la organización asegura que esta actividad es sostenible y tiene "un gran potencial para alimentar y nutrir a la creciente población mundial" . Un escenario en el que los aragoneses tienen un largo camino avanzado.
REALIZADO POR BLUEMEDIA STUDIO
Este contenido ha sido elaborado por BLUEMEDIA STUDIO, unidad Branded Content de Henneo.
Conforme a los criterios de