Solo quedan cuatro productores haciendo este lácteo que se cura en cuevas y que se vende a más de 80 euros por kilo A los pies de los Picos de Europa se cura un queso único en el mundo por su sabor y por su precio . No es el más conocido de los elaborados en Asturias, ese reconocimiento se lo lleva el Cabrales, pero para muchos, sí es el mejor queso del mundo. Y desde luego, el más caro. Puede llegar a venderse a un precio de más de 80 euros el kilo, pero es que el trabajo que hay que hacer para conseguir su sabor, su textura y su olor, bien lo merecen. Solo quedan cuatro productores en Asturias que trabajen esta variedad: el Gamonéu del Puerto . En Benia de Onís se celebra este fin de semana el certamen del Queso Gamonéu, declarada Fiesta de Interés Turístico Regional y que celebra su edición número cuarenta y cuatro. Se trata de un fin de semana dedicado al queso, y donde se puede conocer la zona exacta en la que los pastores y queseros trabajan hasta conseguir este manjar que está en serio peligro de extinción. Sin duda alguna, el momento más esperado del certamen es cuando se elige el mejor queso del año y se conoce su precio. El "puertu", como dicen quienes lo fabrican, es muy duro. Y claro que lo es. Primero, el queso requiere de tres tipos de leche: leche de cabra mantrina, leche cruda de vaca y leche de oveja carranza . Nada más que eso, y fermento y sal. Lo demás, mimos y cuidados y el buen ojo de quien lleva toda una vida dedicándose a ello. Hay dos Denominaciones de Origen dentro del propio queso Gamonéu: El Valle y El Puertu. Para su elaboración se mezclan las tres leches y se les deja reposar un día, para después añadir el cuajo. Esta leche cuajada la van rompiendo los queseros, a mano, poco a poco, hasta que pierde casi todo el jugo y se mete en un molde. Cuando lleva doce horas de reposo se echa sal en una cara, y a las veinticuatro horas se le da la vuelta y se le echa sal a la otra. Así se deja tres días, para después desmoldarlo y colocar las piezas en las estanterías en las que se ahumarán. El humo consigue que se forme un película o corteza, que previene al queso de la entrada de los hongos. Pasado un mes se trasladan los quesos a las cuevas, ubicadas en las majas, en los pies de los Picos de Europa, en el "puertu", de ahí su apellido. Zonas inaccesibles para muchos. Los quesos viajan cargados a la espalda de quienes los hacen o a lomos de burros y caballos. En las cuevas reposan y se curan. La producción comienza con el buen tiempo, suele ser en junio. Y durante meses los productores viven en el puertu, aprovechando las mejores leches de las vacas, cabras y ovejas. Solo con la mejor leche se hace el Gamonéu del Puerto, a diferencia de su hermano el "Del Valle", que se elabora durante todo el año. Cada queso es único. Es durante sus como mínimo dos meses de curación en la cueva donde gana su sabor, su textura y sus aromas. Dicen quienes los siguen fabricando que este queso es mucho mejor que el que se hacía hace años, porque se mantiene la receta primigenia pero se sabe cómo hacer para que no le entren gusanos, hongos o se humedezca. El queso más caro del mundo se fabrica en Asturias y duerme en una cueva, viaja a lomos de un pastor y no puedes dejarlo de probarlo.