Tragos del Bierzo
Mencía, godello y prieto picudo: las uvas de moda del Norte de España para refrescar los brindis
Dominio de Tares ha conseguido colar sus botellas en 25 países del mundo y en los cinco continentes
Natalia Vaquero
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Mencía, godello y prieto picudo: las uvas de moda del Norte de España para refrescar los brindis.
Al vino español se le resisten los lujosos estantes de venta en el sibarita y chovinista mercado mundial de la alta gama, dominado por franceses, italianos y hasta estadounidenses, pero no es por falta de calidad sino porque "no sabemos vendernos", lamenta Rafael Somonte, enólogo y director técnico de los vinos de Dominio de Tares , una bodega que ha puesto al Bierzo en el mapa mundial vitivinícola y que ahora celebra la segunda añada del Paisano de Tares , una elaboración sin pretensiones que seduce sin complejos a holandeses, daneses y canadienses.
"Es un vino que se hace como los de antes, con las uvas que encontramos en los terruños para garantizar un trago afrutado, rico y fácil de beber", asegura Somonte mientras abre una de estas apreciadas botellas de vino elaborado con uvas tintas y blancas de viñedos viejos: mencía berciana, garnacha tintorera, palomino fino, doña blanca y godello.
Vendimiado a mano y pisado con raspón, Paisano de Tares tiene una fermentación espontánea con levadura indígena del viñedo y la bodega y se cría en "cubetos" viejos de roble, explica Somonte al catar este tinto ligero con apariencia de clarete de color púrpura, aromas a violeta, ciruela y frutas del bosque que destaca por su frescura y es ideal para acompañar y aligerar cualquier plato, ya sea en copa, chato o porrón.
El Paisano de Tares, el vino elaborado con uvas tintas y blancas de viñedos viejos. EPC
El enólogo ha presentado también las nuevas añadas de Sonrisa de Tares , un 100% godello del Bierzo Alto, su Cepas Viejas , buque insignia de la bodega 100% mencía, el selecto Bembibre , con una crianza en barricas de roble francés durante 15 meses y 24 meses más en botella, y Tombú, una rareza rosada de la variedad prieto picudo de León y Asturias.
"Con este último vino rendimos homenaje a la tradición de los vinos de las tierras leonesas al mismo tiempo que ponemos en valor la variedad prieto picudo que casi había desaparecido" , explica Rafael Somonte, quien desde la creación de la bodega Dominio de Tares en 2020 ha conseguido colar sus botellas norteñas en 30 países del mundo y en los cinco continentes. "Tenemos unos vinos muy buenos", insiste antes de ensalzar la calidad de los blancos españoles, unos tragos frescos que casan muy bien con la dieta mediterránea y combaten a fuerza de sorbos los calores de entre mayo y septiembre.
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