Tanto el sector del vacuno de carne como el avícola han denunciado los perjuicios que acarreará el acuerdo con Mercosur firmado por la Unión Europea.
Para UPA Castilla y León, el acuerdo supone una vez más que los agricultores y ganaderos vuelvan a ser moneda de cambio cuando de lo que se trata es de firmar cualquier acuerdo o tratado a nivel internacional.
La organización lamenta que la Unión Europea solo haya pensado en vender coches europeos a otras zonas remotas del mundo a la hora de firmar el acuerdo con Mercosur, y que esto lo tengan que pagar entre otros los ganaderos de nuestra comunidad autónoma.
Por ejemplo, los 450 profesionales del sector avícola de Castilla y León que producen al año alrededor de 112.000 toneladas y sacrifican 60.000 animales serán seriamente perjudicados por el mencionado acuerdo.
UPA denuncia lo que es una hipocresía de las autoridades comunitarias, puesto que "cómo se entiende que la UE no deje a sus ganaderos utilizar ciertos productos, pero sí permita que entre en nuestro mercado carne producida con ellos fuera de nuestras fronteras" se preguntan.
De igual modo, califican de "esvergüenza" que las autoridades europeas aboguen públicamente por el consumo de cercanía y el sector agrario interior, pero planean traer peor carne del otro lado del mundo perjudicando a nuestros productores y al medioambiente.
La carne aviar supone un sector muy poderoso a uno y otro lado del Atlántico. Entre 1961 y 2016, la producción mundial de carne de ave pasó de nueve a 120 millones de toneladas. El sector representó cerca del 36% de la producción mundial de todo tipo de carne en 2016.
Para Mercosur, este sector es crucial, puesto que el mayor país de la alianza, Brasil, es uno de los mayores productores mundiales y el primer exportador. Solo en abril de este año, este país exportó 338,9 mil toneladas de carne de pollo (un 34,9% más que en el mismo mes de 2018).
Para la UE, por su parte, la carne de aves supone, a día de hoy, más de 300.000 puestos de trabajo. Muchos de ellos en peligro a partir de que "el acuerdo se haga efectivo".
Mientras, la asociación española de productores de vacuno de carne alertó del "peligro económico" que supondrá para el sector bovino, el mundo rural y la salud de los consumidores europeos el acuerdo alcanzado con Mercosur, que facilitará el acceso al mercado europeo de más de 100.000 toneladas de carne de vacuno sudamericana. Por ello, el colectivo pidió al Parlamento Europeo y a los países miembro que rechacen este acuerdo alcanzado a pesar de la "fuerte oposición" del sector europeo de vacuno, en especial de algunos países, entre los que se encuentra España.
"Ventajas competitivas" Según trasladó el colectivo a través de un comunicado, el aumento de las importaciones de carne de vacuno procedentes de Sudamérica hacia la Unión Europea tiene "numerosas ventajas competitivas" en materia de exigencias sanitarias, trazabilidad, medioambientales o de bienestar animal, pero desestabilizarían "gravemente" al sector europeo de la carne de vacuno.
Por el contrario, alertaron de que se trata de 100.000 toneladas de carne sudamericana producida "con sustancias prohibidas en Europa" y en condiciones de producción "poco o nada legisladas" desde un punto de vista medioambiental y muy relacionados con la deforestación. Además, insistieron en que la mayoría de esta carne procederá de Brasil, donde el sistema de trazabilidad y el control sanitario se sitúan "muy por debajo de la media" y son conocidos mundialmente "por los escándalos recientes de exportación fraudulenta de carne contaminada hacia Europa", insistieron.
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