La segunda edición de la Barcelona Wine Week (BWW) se celebrará, del 4 al 6 de abril en el palacio 8 del recinto Montjuïc de Fira de Barcelona, con un lleno total de su espacio expositivo (10.000 m2). El espacio disponible se completó hace ya dos semanas. Un total de 650 bodegas españolas, y más de 60 denominaciones de origen protegidas (DOP), participarán en el que se ha anunciado como "uno de los mayores programas de ponencias, catas y presentaciones que se pueden disfrutar en España". Se ha incrementado un 20% la presencia de bodegas y un 50% de las DOP respecto a la primera edición. Grandes bodegas como Protos, Marqués del Atrio, Perelada o el Grupo Freixenet participarán por primera vez. Se esperan cerca de 350 compradores internacionales procedentes de 54 países. Se ha incrementado un 20% la presencia de bodegas y un 50% de las DOP respecto a la primera edición La BWW, donde se prevé que haya más de 4.000 reuniones de negocios, será una de las primeras ferias vinícolas que se celebran en Europa tras la pandemia. J. Antoni Valls, director general de Alimentaria Exhibitions de Fira de Barcelona, ha apuntado hoy martes en el espacio Wito de Euroselecció de Barcelona que se mantiene la "clara vocación de contar con la mejor oferta vitivinícola del territorio español" con una apuesta que "sorprendió" en su primera edición. J. Antoni Valls ha explicado que se pretende que "se respire vino" en la ciudad de Barcelona durante los días previos y los de la celebración de la BWW. En torno a 80 expertos, sumilleres y enólogos de prestigio internacional como Frank Smulders, Sarah Jane Evans, François Chartier, Miquel y Mireia Torres, Ferran Centelles, Pilar Salillas, Giorgia Scaramella, José Peñín y Andrés Proensa, entre otros, estarán al frente de las sesiones organizadas por el salón que se independizó de Alimentaria aunque este año vuelve a compartir fechas pero no espacio con la gran feria. El papel clave de las variedades autóctonas de uva y su contribución a un cultivo sostenible y sus mercados será el hilo conductor de buena parte de las actividades de BWW. En el evento también tendrán protagonismo tendencias como el enoturismo 4.0, la digitalización y la innovación en el sector En el evento también tendrán protagonismo tendencias como el enoturismo 4.0, la digitalización y la innovación en el sector. Así, en distintos espacios del área BWW Hub tendrán lugar más de una treintena de sesiones encaminadas a potenciar las experiencias formativas y sensoriales ligadas al vino, algunas de las cuales también estarán enfocadas al negocio. El presidente de la BWW y de la DO Cava, Javier Pagés, ha manifestado que "la feria tiene como gran objetivo situarse como la principal plataforma de negocio del vino español de calidad". Pagés ha destacado la relevancia del enoturismo y "el formato exitoso" de una feria que la pandemia impidió celebrar el año pasado. María Naranjo, directora de la Industria Alimentaria de ICEX (España Exportación e Inversiones), ha manifestado que "se pretende convertir Barcelona en la capital española del vino en el mundo". María Naranjo ha revelado que un total de 3.985 bodegas españolas exportan sus vinos (2.150 de ellas lo hacen regularmente), "lo que pone aún más de relieve la importancia de la visibilización internacional del vino español a través de la BWW". Lee también La Barcelona Wine Week se aplaza hasta abril Ramon Francàs También ha insistido en la importancia de la internacionalización y de la digitalización del sector, que ha calificado como "una apuesta irrenunciable", y ha lamentado que aún hay bodegas españolas que no cuentan ni siquiera con una página web. Ferran Centelles, sumiller de elBullifoundation y especialista regional de España para Jancis Robinson, ha repasado el programa de actos y ha afirmado que "todo el sector está muy ilusionado" con la próxima edición.