1 La Casa de Campo de Madrid tiene 400 nuevos inquilinos. Un rebaño de ovejas que pasta desde hace cinco días con vistas al Palacio Real recién llegados de Puebla de la Sierra, un pueblo de apenas 100 habitantes en el norte de Madrid. Allí se encuentra la cooperativa Los Apisquillos, que ha firmado un contrato con el Ayuntamiento de Madrid para gestionar durante dos años los pastos del parque. Estos ganaderos desembolsarán en las arcas municipales casi 6.000 euros por llevar allí a pastar a los ovinos, cuya estancia servirá para limpiar los pastos y prevenir los incendios, además de regenerar el suelo y fomentar la biodiversidad. Jaime Villanueva EL PAÍS
2 Una de las vías de ingresos de la cooperativa, además de la venta de queso ecológico y yogures en la sede de la asociación Campo Adentro (calle de Buen Gobernador, 4) es la adopción simbólica que ofrecen de estos animales por 20 euros anuales: a cambio, además de un certificado, se recibe una invitación para visitarlos en su zona de pastoreo, un terreno restringido de 900 hectáreas de la Casa de Campo. En la cooperativa Los Apisquillos esperan, de este modo, estrechar el vínculo entre los urbanitas y la naturaleza. Jaime Villanueva EL PAÍS
3 Martha Baba es una de las pastoras que se encarga del rebaño. Esta alemana, bióloga de 29 años enamorada del pastoreo, trabaja en la cooperativa desde que llegó a España hace seis meses. Está a cargo de los animales junto a otros dos pastores. En un castellano casi perfecto que aprendió en Nicaragua, Baba asegura que acercar a las ovejas a la ciudad es una oportunidad estupenda para que todo mundo sienta la misma pasión que ella por el campo. Jaime Villanueva EL PAÍS
4 Una carpa blanca las guarda cuando terminan de comer la hierba en la Casa de Campo que, con cerca de 1.700 hectáreas, es una de las 50 zonas verdes urbanas más grandes del mundo. "Es todo un reto, porque no deja de ser un parque en la ciudad, donde hay mucha gente; con todos los riesgos que conlleva", asegura Álvaro Martín, otro de los pastores de la cooperativa. Este ovejero, segoviano de 45 años, comenta que la policía local se ha acercado para conocerles y que están estudiando la instalación de carteles que adviertan la presencia del rebaño, que vivirá en la Casa de Campo durante el otoño, el invierno y la primavera, ya que en verano se secan los pastos. Jaime Villanueva EL PAÍS
5 No es la primera vez que un rebaño se mete de lleno en la Casa de Campo. Entre 2004 y 2008 ya había ovejas pululando por el parque en un proyecto similar. "Ahora, volverán a regenerar del suelo, con el estiércol, y a fomentar la biodiversidad gracias a la dispersión de las semillas con la que contribuirán", sostiene Inés Sabanés, la delegada del Área de Gobierno de Medioambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid. Campo Adentro ha creado, además, la Escuela de Pastores de la Comunidad de Madrid. Y ha abierto la convocatoria para admitir a 10 alumnos que, entre mayo y agosto de este año aprenderán de manera gratuita y de la mano de expertos ovejeros todo lo que Baba ya domina: el adiestramiento de los perros pastores, la fisiología de los ovinos y caprinos, la elaboración de queso y el diseño de un plan de explotación ganadera. Jaime Villanueva EL PAÍS