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Las dos caras del cereal de invierno en Aragón

03/10/2024
En: heraldo.es
Digital
La cosecha alcanza las 1,94 millones de toneladas, un 45% más que en la pasada campaña, pero todavía un 20% inferior a la media de los últimos cinco años. Labores de recolección de cebada en una explotación agrícola oscense. UAGA La campaña de cereal presenta dos caras bien diferenciadas en Aragón . La amable la han protagonizado los secanos húmedos y semihúmedos así como los regadíos , que gracias a una generosa pluviometría y una gran disponibilidad de agua para riego han terminado el ciclo con rendimientos históricos. La cruz se sitúa en los secanos áridos y semiáridos, aquellos que se encuentran precisamente en la parte suroriental de la Comunidad, que según el mapa de la sequía en Aragón elaborado por el Departamento de Agricultura del Ejecutivo regional, han sufrido el mayor impacto de las falta de lluvias . De hecho, hay zonas de secano muy afectadas por segundo año consecutivo donde las producciones han sido muy bajas o incluso nulas. Son las dos realidades que han expuesto este miércoles el responsable de Innovación de Cooperativas Agroalimentarias de Aragón, Jesús Abadías, y el coordinador técnico de la Red Arax, Luis Gazol, durante la presentación de los resultados del Dossier de Cultivos de Invierno 2023-2024 , que se elabora desde 2019 con el objetivo de transferir conocimiento para facilitar las decisiones de siembra de los agricultores aragoneses. La producción total alcanza los 1,94 millones de kilos. La cifra supone un incremento del 45% respecto al año anterior, aunque hay que tener en cuenta que la pasada campaña fue una auténtico desastre en el que la sequía redujo la cosecha a poco más de 1,3 millones de toneladas. Por eso, si se compara con la media de los últimos cinco años, dicha producción es todavía un 20% inferior. Ha habido menos superficie ocupada por trigos (duro y blando), cebada, avena, centeno o triticale. Se cultivaron exactamente 705.134 hectáreas, un 9% respecto al año anterior, un descenso que es especialmente significativo en la provincia de Teruel . Y aunque es complicado delimitar los motivos de este descenso, los responsables de la Red Arax los achacan a diversos factores, entre ellos la disponibilidad de agua o la obligación de la nueva PAC de dejar un 4% de la superficie en barbecho. A pesar de ello, la cosecha ha mejorado gracias a un incremento de los rendimientos del cereal , que ha pasado de las 1,70 toneladas por hectárea en 2023 a las 2,57 toneladas por hectárea en la pasada campaña. Juan Sánchez, agricultor de Cella, en un campo de cereal afectado por la sequía. Heraldo Pero, como en todo, los promedios son perversos y nada tiene que ver lo recogido en las zonas con abundante pluviometría con lo sufrido en aquellas que, una campaña más, las precipitaciones han sido escasas. "La afección de la sequía ha sido este año muy desigual", ha señalado Gazol. Así, en las comarcas de Valdejalón, Comarca Central, Ribera Baja, Comunidad de Calatayud, Campo de Cariñena y Campo de Daroca, Monegros, Bajo Aragón, Bajo Martín, Cuencas Mineras, Andorra-Sierra de Arcos, Comunidad de Teruel, Maestrazgo, Gúdar-Javalambre y el Matarraña, donde apenas se ha cosechado. " En estas zonas la nascencia e implantación del cereal fue mala con un desarrollo vegetativo muy justo que ha hecho que los rendimientos sean bajos o muy bajos", ha lamentado Gazol Hacia el norte, en los secanos húmedos de la Hoya de Huesca , La Jacetania y las Cinco Villas , los cultivos han contado con suficiente agua y unas suaves temperaturas primaverales que ha permitido unas buenas producciones. "Incluso algunos secanos húmedos se han comportado mejor que el regadío", ha matizado el responsable técnico de la Red Arax, que ha insistido en que las tierras de riego "han sido sin duda las más beneficiadas, ya que han tenido una buena campaña, sin restricciones de agua en los principales sistemas de riego de la margen izquierda y con una baja incidencia de plagas y enfermedades". Un patrón que se repite en todas las especies de cereales, donde los buenos resultados se cosechan en secanos húmedos y regadío y los descenso se los anotan los cultivos situados en secanos áridos. Te puede interesar La ayudas directas de Aragón por la sequía llegarán a más de 6.800 agricultores y ganaderos de 304 municipios El final de la cosecha ha coincidido, sin embargo, con un momento de caída de las cotizaciones del cereal . "Han ido bajando desde los máximo marcados durante la crisis de la covid y el comienzo de la guerra de Ucrania", ha señalado Abadías, que ha matizado que si al comienzo de la campaña los precios se situaban en torno a los 250 euros la tonelada, actualmente están en una media de 200 euros. "Eso significa que en las siembras los inputs (semillas, gasóleo, abonos..) se compraron a precios elevados y ahora la venta de las producciones se ha hecho a precios más bajos, lo que supone una pérdida de rentabilidad para las explotaciones", ha destacado el representante de Cooperativas Agroalimentarias. Un cambio en las siembras del maíz Las lluvias también han jugado un papel decisivo en la evolución de la campaña de maíz. A finales de 2023 la situación de los embalses era "pésima" por la extrema sequía, ha recordado Abadías. Pero las reservas se fueron recuperando y con ellas el ánimo de los agricultores que se lanzaron a la siembra de este cereal de primavera . Hay sin embargo un matiz. Lo habitual en años anteriores en Aragón ha sido que las primeras siembras tuvieran más presencia que el maíz de segunda siembra. En esta campaña se ha producido la situación contraria "porque mucha gente utilizó la primera siembra para cultivar cereal de invierno ya que se temía que no hubiera agua para regar", ha destacado el representante de Cooperativas Agroalimentarias. Ahí están los números. De las 84.000 hectáreas planificadas este año (51.000 en la pasada campaña), 54.000 son de segunda cosecha y unas 30.000 de primera y casi todas ellas están vinculadas a la provincia de Huesca, con 70.000 hectáreas, de las que 50.000 son de segunda siembra. Los responsables de Arax han preferido, sin embargo, no hacer estimaciones de cosecha porque han recordado que "está comenzando la recolección" y "las cosechas de segunda son de ciclo más corto y rendimientos menores". Conforme a los criterios de
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