El agua se agota. A pesar de tanto repetirse, no acabamos de creerlo. La desertificación es una posibilidad que debemos contemplar. Basta mirar los niveles de nuestros embalses, a un 51,7% de su capacidad, bastante por debajo de la media de la última década (65,6%). En España contamos con 1.300 embalses que captan, almacenan y reparten el agua. Según datos del Plan Hidrológico Nacional, a mediados de siglo tendremos una reducción del 7% en las precipitaciones, lo que se traducirá en una disminución del 18% en la aportación de agua de las cuencas fluviales. El nuestro será uno de los 33 países con más problemas de abastecimiento para 2040, una situación que, de no tomarse medidas efectivas para la gestión sostenible del agua, generará graves consecuencias. Hasta un 75% de nuestro territorio podría sufrir episodios de desertificación. De ahí la necesidad de una administración integrada de los recursos hídricos que tenga en cuenta la planificación territorial, la gestión de las cuencas hidrográficas y la adaptación al cambio climático. Además de la escasez, otros desafíos son también de gran envergadura, como la sequía, la contaminación del agua y la sobreexplotación de los acuíferos. Es en esta encrucijada en donde Dinapsis cobra toda su relevancia. Se trata del proyecto de transformación digital más importante de Hidralia, perteneciente al grupo Agbar, que apuesta decididamente por un cambio estructural en favor de ecosistemas sostenibles de gestión del agua y la salud medioambiental. Su objetivo es gestionar de forma eficiente e integrada todos los procesos y hacer un seguimiento permanente del ciclo completo del agua mediante la realización de diagnósticos avanzados que permitan optimizar los activos, su mantenimiento y las inversiones. Dinapsis se estructura en una decena de hubs que se extienden a lo largo de la geografía española como una red de neuronas interconectadas entre sí. De esta red se nutren numerosos servicios innovadores orientados a la preservación de los recursos esenciales, especialmente del agua, a través de Dinapsis for Water , cuyo fin es transformar el ciclo del agua aplicando todas las tecnologías de vanguardia. Mundo digital y agua. ¿Cuál es la relación? ¿Dónde encontrar las sinergias? Agbar ha encontrado este nexo. La monitorización en remoto, la algoritmia basada en inteligencia artificial y el análisis de big data aportan valiosísima información para la toma de decisiones a la medida de cada situación o necesidad. Dinapsis implementa herramientas de hipervisión y analítica avanzada de datos en tiempo real que permiten un conocimiento profundo de la red hídrica y de su comportamiento. Este conocimiento anticipado permite una mayor prontitud y eficiencia ante posibles eventualidades, así como optimizar las actuaciones e inversiones necesarias a corto y largo plazo. Cada centro de Dinapsis se orienta a temáticas específicas según la sensibilidad del área en la que se ubique, actuando como acelerador de innovación en el ecosistema local. El hub Costa del Sol, ubicado en Marbella, es pionero en la aplicación de tecnologías innovadoras y eficientes para hacer frente a la escasez hídrica, además de aportar los servicios digitales necesarios para ayudar a los municipios a conseguir su neutralidad en carbono, siendo un actor clave en eficiencia energética. Toda la red de hubs que componen Dinapsis se encuentra monitoreada y supervisada por un centro especializado en ciberseguridad, con objeto de garantizar la continudiad del servicio del suministro de agua en todo momento y ofrecer una respuesta ágil e inmediata ante una eventual amenaza informática. Pero Dinapsis no solo es un espacio para la innovación tecnológica. También lo es para la colaboración público-privada y la formación. Sus iniciativas como Dinapsis Hackathon y Dinapsis Open Challenge tienden puentes de conexión con el entorno universitario y con el ecosistema de innovación de un territorio para apoyar el talento de emprendedores y startups . Con esta suite de servicios integrales, Hidralia tiende la mano a sociedad, administraciones y empresas. Porque el objetivo final involucra a todos: alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible, incorporar la transformación digital a la gestión del entorno y ofrecer soluciones a los retos del cambio climático.