El proyecto LIFE Olivares Vivos se ha situado como ejemplo para conciliar la recuperación de la biodiversidad en la agricultura y la rentabilidad en esta actividad. Así, aparece como "aliado clave" en la protección de especies como el aguilucho cenizo, Ave del Año 2023, y pone sobre la mesa el amplio margen de mejora de las políticas agrarias. JAÉN, 26 (EUROPA PRESS) El proyecto LIFE Olivares Vivos se ha situado como ejemplo para conciliar la recuperación de la biodiversidad en la agricultura y la rentabilidad en esta actividad. Así, aparece como "aliado clave" en la protección de especies como el aguilucho cenizo, Ave del Año 2023, y pone sobre la mesa el amplio margen de mejora de las políticas agrarias. Así lo ha indicado este miércoles SEO/BirdLife, desde la que se ha explicado que la citada rapaz migratoria asociada está viendo su población afectada por la intensificación agrícola, principalmente por el uso abusivo de fitosanitarios en los campos de cereal o la pérdida de estos terrenos en favor de cultivos leñosos o la instalación de plantas fotovoltaicas. De hecho, según el último censo realizado por la organziación, ha habido un declive poblacional de entre el 23 y el 27 por ciento en diez años. Ante esta situación, ha reivindicado el proyecto Olivares Vivos como "modelo de agricultura que está reviviendo el campo" y sigue "aportando soluciones para frenar esta situación, sin menoscabar la rentabilidad de los agricultores". Catalogado como Vulnerable en el Libro Rojo de las Aves de España y en el listado de flora y fauna amenazada de Andalucía, el aguilucho cenizo forma parte de las aves ligadas a los ambientes agrarios y las grandes estepas cerealistas. Con predilección por los cultivos de avena, cebada y trigo para hacer sus nidos, el Ave del Año 2023 --que puede verse por la península ibérica desde primavera hasta finales de agosto-- es un excelente controlador de plagas como las de topillos, ratones o langostas. No obstante, cada vez son menos. En una década, se han perdido cerca de 1.500 parejas, encontrándose los mayores descensos en Galicia, Extremadura, Madrid, Euskadi o Andalucía. Los motivos principales que están llevando a este "declive tan acusado" son la intensificación de la agricultura y la pérdida de su hábitat por trasformaciones a cultivos leñosos y, últimamente, a su ocupación por plantas solares fotovoltaicas. Al anidar mayoritariamente en el suelo, la tendencia a adelantar la fecha de recolección por el uso de variedades con maduración más tempranas, aumentan considerablemente el porcentaje de mortalidad de huevos y pollos. FITOSANITARIOS Y PLANTAS FOTOVOLTAICAS Asimismo, la aplicación de fitosanitarios afecta directamente a las presas potenciales de esta rapaz, dejándola sin su principal fuente de alimento. A este escenario marcado se suma la considerable reducción que han experimentado los campos cerealistas, debido a su escasa rentabilidad y sustitución por cultivos leñosos en las últimas décadas. Así, el paisaje agrario en los últimos tiempos ha variado su composición, existiendo cada vez más campos cubiertos de cultivos leñosos, casi siempre en producción intensiva o superintensiva. A esto se ha unido en los últimos años la proliferación de grandes plantas fotovoltaicas que casi siempre se proyectan sobre cultivos cerealistas de secano debido a su menor precio respecto a otros cultivos más rentables. El desarrollo de las energías renovables es tan urgente como la protección del patrimonio natural y la biodiversidad, pero debería seguir un despliegue más ordenado, siendo posible disminuir considerablemente su impacto negativo sobre la conservación de nuestro capital natural. PLANIFICACIÓN INTEGRADA Por ello, SEO/BirdLife defiende la necesidad de una planificación territorial más integrada con los aspectos sociales y ambientales para garantizar, con ello, una transición energética sostenible y justa con especies como el aguilucho cenizo y otras aves esteparias como la avutarda euroasiática, el sisón común o la alondra ricotí (estas dos últimas, declaradas recientemente En Peligro de Extinción). El director del proyecto LIFE Olivares Vivos+ y delegado de SEO/BirdLife en Andalucía, José Eugenio Gutiérrez, ha considerado que el fondo del problema de la conservación del aguilucho cenizo, como del resto de especies agroesteparias, radica en la falta de rentabilidad de los cultivos herbáceos de secano. En agricultura, sin rentabilidad no puede haber sostenibilidad y los problemas ambientales y económicos van siempre de la mano. "Por este motivo, es imprescindible abordarlos conjuntamente y, para ello, tenemos que trascender el ámbito agrario y abarcar toda la cadena agroalimentaria, desde el productor hasta el consumidor. La estrategia es recuperar biodiversidad y transformarla en rentabilidad para los agricultores", ha defendido. POLÍTICAS Y COMPLICIDAD DEL CONSUMIDOR A su juicio, para transformar biodiversidad en rentabilidad es necesario apoyar a los agricultores con unas políticas agrarias que apuesten de forma decidida por la conservación del capital natural, pero también contar con la complicidad de los consumidores a través de sus opciones de compra. En este sentido, instituciones y ciudadanos deben apoyar modelos agrícolas que vayan más allá de la mera productividad y valorar la importancia de las externalidades sociales y ambientales que tienen los modelos agrícolas que protegen la biodiversidad y la salud de las zonas rurales. Este es el camino en el que trabaja Olivares Vivos desde hace ya casi una década y que "ha servido para demostrar, bajo una base científica, que recuperar biodiversidad y transformarla en rentabilidad es posible". Igualmente, ha mostrado el "amplísimo margen de mejora" de las políticas agrarias. En este sentido, en 2020, desde el proyecto LIFE Olivares Vivos se trasladó a la Unión Europea el documento 'Recomendaciones para el diseño de la PAC Post-2020 relativa al olivar', donde se reseña la gran importancia de la diversidad paisajística en los campos agrícolas para conservar y recuperar biodiversidad. INTERCALAR CULTIVOS En este documento, respecto al hábitat agroestepario, se argumentaba que la intercalación de cultivos herbáceos en la matriz de cultivos leñosos es fundamental para conservar y recuperar la biodiversidad en estos paisajes agrícolas. De ahí que haya sostenido que la PAC debería abordar los efectos que está provocando la expansión acelerada del olivar y otros leñosos a costa de la desaparición de cultivos herbáceos de secano y contrarrestarla con la promoción de su mantenimiento y el incentivo de su rentabilidad por medio de la PAC. Junto a ello, se sigue demandando continuamente a las administraciones públicas un mayor esfuerzo para la protección de estos cultivos. Por ejemplo, a partir del trabajo de SEO/BirdLife en los procesos participativos del Pepac o enviando a las administraciones competentes su valoración y propuestas para la mejora de las intervenciones de desarrollo rural Feader en Castilla-La Mancha y Andalucía. VALOR AÑADIDO En todo caso, además de la importante labor de las políticas agrarias, la vía del valor añadido es la principal línea de trabajo para incrementar la rentabilidad de las producciones agrícolas que conservan biodiversidad. Tras los buenos resultados del LIFE Olivares Vivos (2015-2021), ahora se trabaja en la replicación de este modelo de agricultura a todo el olivar de la UE y la transferencia a otros cultivos, como el viñedo y los herbáceos de secano. Una transferencia que se apoya en el LIFE Olivares Vivos+ (2021-2026) y, sobre todo, en el proyecto Secanos Vivos que desarrolla SEO/BirdLife. Un proyecto que, con la ayuda de productores y consumidores, contribuirá a la conservación del aguilucho cenizo y del resto de aves agroesteparias. A esta iniciativa se suma otra recientemente presentada por SEO/BirdLife, el LIFE Agroestepas Ibéricas para conservar las aves agroesteparias como el sisón, la avutarda y el aguilucho cenizo en 13 espacios de la Red Natura 2000 de Extremadura, Aragón y el Alentejo portugués.