El Consejo de Ministros aprobó este viernes 27 de septiembre, a propuesta del MAPA, un real decreto que establece las bases de las actuaciones de prevención, control y erradicación de la rinotraqueítis infecciosa bovina (IBR) y se establece un programa nacional voluntario contra dicha enfermedad.
Según el Ministerio de Agricultura, se trata de una enfermedad vírica del ganado bovino, que ocasiona síntomas respiratorios y reproductivos y da lugar a importantes daños económicos, tanto directos, por la pérdida de fertilidad, como indirectos, ya que genera restricciones al comercio de animales, semen, óvulos y embriones.
Al respecto, la normativa de la Unión Europea prohíbe la comercialización de semen, óvulos y embriones de rebaños seropositivos a la IBR y el transporte de animales vivos infectados a los países o zonas declarados libres o que tienen un programa de control y erradicación aprobado, salvo que se cumplan una serie de medidas sanitarias específicas.
Dado que cada vez son más los países de la UE que cuentan con programas de control y erradicación de IBR, añade este departamento, es preciso establecer un marco nacional para que el control de la enfermedad se realice de forma homogénea en el territorio nacional
Para ello, las principales medidas que regula el real decreto son el establecimiento de un programa de prevención, control y erradicación de IBR, de carácter voluntario para los ganaderos.
También, la sustitución de las vacunas convencionales por vacunas marcadas, para permitir la diferenciación de los animales vacunados de los que han estado en contacto con el virus, así como la calificación sanitaria oficial reconocida para las explotaciones bovinas de todo el territorio nacional, en función de las medidas que adopten frente a la IBR y de los resultados de los análisis de laboratorio establecidos.
Por otro lado, se regula de manera oficial los movimientos de animales entre las explotaciones que voluntariamente se hayan adherido al programa, con el fin de mantener su calificación sanitaria.
El Laboratorio Central de Veterinaria de Algete queda designado como laboratorio nacional de referencia de IBR.
El MAPA pretende, de este modo, mejorar el control de esta enfermedad a medio plazo, lo que permite una adaptación progresiva en las explotaciones con mayor presencia de IBR, minimizando el impacto sobre el comercio y los movimientos comerciales.