Los científicos están tratando de comprender cómo un rebaño de cabras no sólo sobrevivió sino que prosperó en una isla aislada en el noreste de Brasil , durante más de dos siglos sin ninguna fuente de agua dulce conocida. No está claro cómo llegaron los caprinos a Santa Bárbara , una de las cinco islas volcánicas que conforman el archipiélago de Abrolhos , a unos 70 kilómetros de la costa de Bahía, pero los investigadores creen que fueron traídas y olvidadas allí por los colonizadores. El ganado, como las cabras, los cerdos y las aves de corral, constituía una fuente fiable de alimento, pero era abandonado a su suerte cuando la colonización fracasaba. Su presencia en la isla de Santa Bárbara está documentada desde hace más de 250 años, según registros históricos, lo cual resulta notable si tenemos en cuenta que el islote carece de manantiales de agua dulce conocidas. A pesar de este inconveniente, las cabras prosperaron en la isla seca y ventosa hasta el punto de tener que ser reubicadas para proteger la flora y fauna endémica . El mes pasado, el Instituto Chico Mendes para la Conservación de la Biodiversidad (ICMBio), que gestiona el Parque Nacional Marino de Abrolhos, llevó a cabo la retirada de las últimas 27 cabras , tras concluir que su presencia comprometía el equilibrio ecológico de la isla, afectando en particular a siete especies de aves marinas que se reproducen en la región. Dos cabras, en uno de los acantilados de la isla de Santa Bárbara. Jessyca Teixeira/ICMBio Abrolhos Los animales no fueron sacrificados porque los científicos quieren estudiarlos, en particular su capacidad para subsistir con poca o ninguna cantidad de agua, indica un medio local . ¿Cómo sobrevivieron durante 250 años? Durante todo el tiempo que los científicos estudiaron a las misteriosos cabras, nunca las vieron bebiendo agua , lo que plantea la pregunta: "¿Cómo sobrevivieron allí durante 250 años?". Llegados a este punto, los expertos solo pueden especular. Algunos creen que podrían haberse adaptado a beber agua de mar y que este comportamiento se transmitió a las generaciones posteriores, mientras que otros atribuyen la supervivencia de los animales a la verdolaga , una planta con alto contenido acuoso que se encuentra en Santa Bárbara. El equipo científico también destacó que la mayoría de los nacimientos en la isla fueron de gemelos, lo que sugiere que estaban " bien nutridas y sanas ". Al estudiar al sorprendente grupo de caprinos, los expertos esperan descifrar el secreto de su extrema resiliencia , lo que podría ayudar a desarrollar nuevas razas más adecuadas para sobrevivir a los desafíos del cambio climático y adaptarse en regiones áridas, como el noreste de Brasil.