Un Pirineo más eficiente con el uso de sus propios recursos
Operación 'Jaula' para localizar a Puigdemont mientras continúa la investidura de Illa
Un Pirineo más eficiente con el uso de sus propios recursos
BioPirineo es un proyecto que ha comenzado a desarrollarse en el Parque Natural de los Valles Occidentales propulsando el sector forestal, ganadero, agrícola y turístico.
Todos los sectores que va a abarcar el proyecto están muy relacionados entre sí.
Aitor Borruel
Conectar la naturaleza con la economía. A grandes rasgos, y de manera muy resumida, es el objetivo de BioPirineo , un proyecto piloto en el Parque Natural de los Valles Occidentales y su entorno que ha arrancado recientemente. La apuesta es lograr un Pirineo más eficiente a través de actividades económicas y sostenibles en el sector forestal, ganadero, agrícola y turístico.
La iniciativa, coordinada por Ecodes en colaboración con el Instituto Pirenaico de Ecología (IPE), el Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA) y la asociación eco-unión, cuenta también con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por los fondos Next Generation de la Unión Europea. "Desde hace décadas hay una disgregación entre la naturaleza y la economía -explica Pablo Pevidal, coordinador del proyecto-. Tenemos unos excelentes recursos naturales y pretendemos conectarlos y generar actividad económica, explotándolos de una manera sostenible y técnicamente viable".
El plan es sobre todo demostrativo, como un experimento, ya que se va a trabajar sobre el propio territorio para comprobar si funciona, con idea de que se pueda replicar a otras partes del Pirineo más adelante. "Vamos a realizar determinadas acciones puntuales, con planes que ya tenemos de ordenación forestal, ganadera... -resume Pevidal- Estamos trabajando de la mano del Gobierno de Aragón y de los distintos ayuntamientos".
A corto plazo, el proyecto tiene una duración de dos años. La primera fase consiste en hacer estudios con los agentes locales y autonómicos, un diagnóstico socioeconómico en todos los campos, ver qué actuaciones son necesarias. A partir de ahí, se van a marcar parcelas y zonas en las que trabajar ciertos productos y desarrollar esas actividades económicas. Además, se pretende identificar las necesidades de la población y de empresas privadas a las que, aunque a día de hoy no están asentadas, podría resultarles muy interesante hacerlo si comprueban que tienen la oportunidad de generar en la zona actividad económica.
"Hay que cambiar el modelo de gestión, para que sea sostenible y atraiga empresas y población"
Una de las grandes 'patas' sobre las que se asienta BioPirineo es la de la explotación forestal. Es un hecho que la masa de bosques ha crecido en Europa en general y en España en particular en los últimos 20 años. Por diferentes razones, como la falta de relevo generacional o la despoblación, han disminuido actividades tradicionales como la ganadería extensiva o la industria forestal, y eso ha propiciado que la naturaleza haya ganado terreno, lo que dificulta el acceso a los pastos más altos o aumenta el riesgo de incendios.
Te puede interesar
Tecnología al servicio de los animales
Mejor gestión forestal
La opinión de Pevidal está clara. Como ingeniero con una amplísima trayectoria en el voluntariado relacionado con la naturaleza y el cuidado del territorio, lo que hace falta es un cambio en el modelo hacia una gestión sostenible. Dicha gestión forestal sostenible se logra, en su opinión, facilitando que aumente la actividad económica tanto en el ganado bovino como en el vacuno. También limpiando las pistas forestales y clareando el bosque , lo que a su vez conlleva toneladas de madera que pueden aprovecharse; que los árboles crezcan; que esa vegetación consuma menos agua...
En suma, se pretende hacer acciones piloto para que estas iniciativas sean sostenibles medioambiental y económicamente a medio y largo plazo, de tal forma que atraigan empresas que desarrollen su actividad y sean viables sin necesidad de subvención, lo que a su vez generará empleo y supondrá fijar población.
Hacer pistas forestales empuja a crear un turismo sostenible, por donde los visitantes puedan circular con comodidad y conocer el territorio. Y por supuesto, dichas pistas también son una ayuda a la ganadería extensiva, pues hacen sencillo el acceso a los lugares más altos para vigilar a los animales . "Por ejemplo, permiten que el ganadero pueda subir con su coche -reflexiona Pevidal-. Tal vez no es la opción más sostenible pero sí la más factible y atractiva para un joven que obviamente desea tener las mismas condiciones laborales que cualquier otro y los mismos días de descanso o vacaciones".
Respecto a la agricultura alternativa, se están haciendo pruebas para ver cómo frutales y hierbas aromáticas que históricamente se han desarrollado siempre muy bien en zonas bajas como puede ser la provincia de Zaragoza o en la Comunidad Valenciana, también puedan crecer en territorios de montaña.
Conforme a los criterios de