La Unión de Agricultores y Ganaderos de Navarra (UAGN) ha exigido a la distribución comercial que no use productos agroalimentarios de primera necesidad, como la leche o el aceite, como reclamo para atraer clientes a los establecimientos.
Esta práctica, denuncia el sindicato en un comunicado, que se incrementa en períodos como la oevuelta al cole en los que suele haber un mayor consumo entre las familias, "consiste en ofrecer al consumidor productos de muy bajo precio, poniendo en riesgo la viabilidad de las explotaciones agrarias y forzando a los agricultores a reducir sus márgenes de rentabilidad".
El objetivo, explica, es "atraer a los consumidores a los centros comerciales para que compren también otros productos donde los márgenes de ganancia de la distribución comercial son mayores".
La UAGN considera que estas prácticas "entran en contradicción" con el compromiso de las grandes superficies con el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente "por un funcionamiento eficiente y sostenible de las cadenas de valor de la leche y los productos lácteos".
oeSe ofrece el brick de leche a 57 céntimos cuando el observatorio de precios de la leche gestionado por el Ministerio indica que estos valores no permiten remunerar de forma justa y equilibrada al conjunto de la cadena, siendo el más perjudicado el ganadero", lamenta la UAGN.
De hecho, agrega, la reducción "drástica" del número de explotaciones así lo acredita, con un descenso interanual en España del 6 % de ganaderos con entregas de leche y del 5,2 % en Navarra, donde quedan únicamente 148 explotaciones.
Este comportamiento de la distribución es homogéneo en todos los lineales visitados en la primera semana de septiembre, donde los precios de las cajas más baratas de leche difieren en apenas dos céntimos, lo que "es una burla al consumidor porque el importe final de su cesta de la compra no se reduce, sino que se incrementa por estar condicionada por estrategias de marketing", afirma.
UAGN exige "compromiso y honestidad" a la distribución comercial con el sector primario, de modo que abandone prácticas donde la leche, el pollo, el aceite y otros productos de primera necesidad y gran consumo "dejen de ser utilizados como reclamo ante el consumidor ya que fomentan una cadena alimentaria de menos valor, menos innovadora, menos competitiva y un retroceso en la calidad de vida en el medio rural que favorece el despoblamiento".