Hace ya más de una década que comenzó a funcionar la Bóveda de Semillas que representa la mayor colección de diversidad de cultivos del mundo . Un búnker que se encuentra bajo el hielo en lo profundo de una montaña de la isla remota de Svalbard, entre Noruega y el Polo Norte. Como detallan en la web oficial, la Bóveda Global de Semillas de Svalbard es "una instalación de almacenamiento de semillas a largo plazo", construida para resistir el paso del tiempo y el desafío de los desastres naturales o provocados por el ser humano. ¿Por qué surge esta reserva mundial? Esta gran reserva mundial surge como una necesidad por la vulnerabilidad de los bancos de germoplasma que tienen colecciones de cultivos alimentario s en su custodia ante posibles desastres, guerras o catástrofes. La vulnerabilidad de estos bancos hizo que surgiera la idea de crear una boveda global de semillas, como instalación de respaldo. " El propósito es almacenar duplicados (copias de seguridad) de muestras de semillas de las colecciones de cultivos del mundo", detallan. Ahora, España ha enviado por primera vez a esta bóveda variedades de trigo, tomates, maíces y legumbres para que se conserven en este gran almacén agrícola mundial. Un equipo de investigadores del Centro de Recursos Fitogenéticos (CRF) del INIA-CSIC ha elegido más de mil variedades vegetales de la colección nacional que serán depositadas en bóveda mundial de semillas. Estas son todas las variedades españolas "Por primera vez, esta instalación incorporará variedades procedentes de España, país de gran riqueza en biodiversidad al ser puente entre Europa, Iberoamérica y África" , explican los expertos del Centro de Recursos Fitogenéticos (CRF) del INIA-CSIC en un comunicado . Se trata de una especie de Arca de Noé vegetal, una infraestructura científica mundial situada en esta isla del Ártico, que guarda la mayor colección de biodiversidad agrícola. "Este material, también conocido como recursos fitogenéticos, constituye la base de casi todos nuestra alimentación", explica Luis Guasch, investigador del INIA-CSIC y director del Centro de Recursos Fitogenéticos del instituto. "Las primeras 1.080 variedades españolas ya están preparadas en congeladores del INIA-CSIC", detalla el experto. Así, "300 son cereales de invierno, 114 de las cuales corresponden a trigos; 510 son leguminosas, de las que 189 son judías; 200 son hortícolas, 81 de ellas tomates, y 108 variedades de maíces", explica.