La DPZ y la Universidad de Zaragoza impulsan por segundo verano el programa Desafío, con el que 23 jóvenes hacen prácticas en 12 empresas o instituciones de pueblos.
E. P. B.
De prácticas en los pueblos de Aragón HA De prácticas en los pueblos HA
El verano es la época de prácticas para cientos de jóvenes. Y 23 de ellos aprovechan estos meses para llevar la teoría a la práctica gracias a la segunda edición del programa Desafío, impulsado por la DPZ y la Universidad de Zaragoza en el medio rural.
Tras el éxito del proyecto piloto, la institución provincial ha triplicado el presupuesto para que más jóvenes universitarios puedan aprender y formarse en empresas, instituciones y asociaciones situadas en municipios de hasta 3.000 vecinos. Gracias a este 'Erasmus rural' que pasa de 9.000 a 30.000 euros 23 estudiantes pueden aprender y formarse en 12 pueblos diferentes , y reciben una ayuda al estudio y gastos de alojamiento y de desplazamiento incluidos.
El programa Desafío es una de las líneas de trabajo que ha impulsado desde su creación la Cátedra sobre Despoblación y Creatividad de la Diputación de Zaragoza. Va dirigido a estudiantes matriculados en la Universidad de Zaragoza que hayan superado 90 créditos de su titulación, que no estén empadronados en la zona en la que se realizarán las prácticas y que deseen adquirir una experiencia laboral y vital en organizaciones creativas e innovadoras emplazadas en el medio rural. El objetivo de esta iniciativa conjunta es facilitar el encuentro entre la oferta y la demanda de talento apoyando a los jóvenes que deseen afrontar este reto inédito y desafiante.
A las prácticas pueden adherirse empresas de todos los sectores industriales, instituciones públicas, fundaciones, oenegés vinculadas al territorio A diferencia de la primera edición, este año las empresas de más de 250 trabajadores sí pueden participar en el programa Desafío , con la condición de que sean ellas, y no la DPZ, las que asuman la ayuda al estudio que reciben los estudiantes.
Participan alumnos de Derecho, Arquitectura, Arte, Trabajo Social, Márquetin, Economía, Periodismo, Ingeniería Biomédica, Veterinaria o Ciencia y Tecnología de los Alimentos que pasan un verano diferente en 12 pueblos , trabajando y formándose en distintas instituciones, empresas o asociaciones.
Esther, Carmen y Víctor, en la granja de Cubel. T. Y. "Yo aporto experiencia y ellos conocimiento y ganas" Por la explotación ovina del ganadero Tomás Yagüe en Cubel pasarán este verano cuatro estudiantes de Veterinaria de la Universidad de Zaragoza. Tres de ellos Esther Mora, Víctor Peñalosa y Carmen Ceresuela han comenzado ya a ponerse al día con el cuidado de las ovejas y con el trabajo de una granja.
Es una forma de llevar al terreno todo lo aprendido durante su paso por la facultad. "Yo les aporto experiencia, y ellos, conocimiento y muchas ganas. Aparte de ayudar en la explotación, aprenden. Están ellos solos, sin profesor , y asumen la responsabilidad", asegura. "Es un intercambio positivo para todos".
Una opinión que comparten los jóvenes estudiantes. Así, Víctor asegura: "Es nuestra primera oportunidad. Nos da vía libre en la granja, y eso se agradece. En la facultad estamos en el servicio clínico de rumiantes".
Derry, María, Alfredo y Miguel, en Calatayud. V. T. "Trabajan con el patrimonio y conocen el arte mudéjar" La Asociación Territorio Mudéjar ofrece este verano prácticas a cuatro estudiantes:dos del grado en Historia del Arte y dos del Máster Universitario en Gestión del Patrimonio Cultural. Derry Holgado, María Foradada, Alfredo Notivol y Miguel Cañas pueden reforzar así sus estudios en una asociación que engloba 30 municipios y que nació con un objetivo: gestionar una red de trabajo en la que se aborden proyectos de gestión sobre recursos de patrimonio cultural bajo el paraguas de Mudéjar Patrimonio Mundial. Su directora, Victoria Trasobares, explica que los jóvenes "trabajan de manera específica la calidad y accesibilidad al patrimonio monumental" y colaboran en un proyecto "piloto", para celebrar en septiembre el primer aniversario de Territorio Mudéjar. Según dijo Trasobares: "Los estudiantes están trabajando directamente con el patrimonio y mejorando su conocimiento del arte mudéjar".
Ana y Miguel, en la Iglesia de San Agustín del Pueblo Viejo de Belchite. Mª J. A. "Es una toma de contacto con el mundo audiovisual" Recopilar los testimonios de los supervivientes de la Batalla de Belchite . Este es el tema en el que van a trabajar todo el verano Miguel Nadal y Ana Aznárez , estudiantes de Periodismo en la Universidad de Zaragoza. Estos jóvenes realizan prácticas en la Fundación Pueblo Viejo de Belchite, que participa por primera vez en el programa Desafío. Miguel reconoce que la experiencia está siendo "muy positiva" y los vecinos les están pasando muchos contactos. "Es una primera toma de contacto de lo que quiero hacer relacionado con el mundo audiovisual ", indicó.
María José Andrés, coordinadora de la fundación, relata que el trabajo se ha estructurado en varias partes. Primero se elaboró un listado de los supervivientes de la batalla y se contactó con ellos. "Los vecinos han traído documentación y fotos inéditas". Ana y Miguel están llevando a cabo "un gran trabajo". Llegaron a Belchite a mediados de julio y los primeros 15 días hablaron con la gente "sin cámaras ni grabadoras". Ahora están completando ya la segunda parte; grabar los recuerdos los testimonios. La tercer y última fase consistirá en editar el material que hayan recopilado.
"Se han ganado la confianza de la gente y eso, independientemente del resultado audiovisual, es una maravilla" , dijo. El trabajo se ha estructurado en tres temas: auxilio social, papel de la mujer en la Guerra Civil y cómo vivieron la transición del pueblo viejo al pueblo nuevo. Son los tres temas sobre los que se preguntan a los entrevistados.
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