INFORMACIÓN ACERCA DE LAS COOKIES UTILIZADASLe informamos que en el transcurso de su navegación por los sitios web del grupo Ibercaja, se utilizan cookies propias y de terceros (ficheros de datos anónimos), las cuales se almacenan en el dispositivo del usuario, de manera no intrusiva. Estos datos se utilizan exclusivamente para habilitar y estudiar de forma anónima algunas interacciones de la navegación en un sitio Web, y acumulan datos que pueden ser actualizados y recuperados. En el caso de que usted siga navegando por nuestro sitio Web implica que acepta el uso de las cookies indicadas. Puede obtener más información, o bien conocer cómo cambiar la configuración, en nuestra sección Política de cookies


PROCURADORA CÁCERES | Fátima de Quintana, procuradora y ganadera en Cáceres: Me incorporé como agricultora a título...

10/03/2025
En: elperiodicoextremadura.com
Digital
Pregunta: Sobre su profesión existe mucho desconocimiento. ¿Cómo explicaría a alguien ajeno al mundo jurídico quién es el procurador? Respuesta: La función que todo el mundo conoce es la de representante procesal. Es decir, actuamos en nombre de la persona física o jurídica, tanto de la parte actora como de la demandada. Sin embargo, nuestra labor va mucho más allá. Presentamos los escritos requeridos, recibimos todas las notificaciones que surgen a lo largo del procedimiento judicial y las remitimos tanto al abogado como al cliente para que estén informados de lo que sucede. Pero no se trata solo de una función de comunicación básica, sino que también asumimos responsabilidades más específicas, como el pago de tasas y depósitos, y llevamos directamente la ejecución del procedimiento, una fase en la que hay trámites, como la gestión de subastas, que nos corresponden exclusivamente. En definitiva, nos ocupamos de que todo el proceso transcurra correctamente y cumpla con todos los requisitos legales. P: ¿A qué atribuye esta falta de conocimiento? R: El desconocimiento se debe a que nuestro trabajo no es visible. Vamos a los juicios, nos sentamos y tomamos notas, pero no intervenimos, lo que hace que parezca que estamos en la sombra. Quien realmente ve nuestro trabajo día a día es el abogado, mientras que el cliente solo ve el resultado final. P: ¿Considera que debería darse más a conocer? R: Creo que sí, pero sabemos que la labor de comunicación no es fácil. Hay abogados que nos apoyan y nos dan un poco más de visibilidad, pero hay otros que podrían ayudarnos algo más y, sin embargo, nos dejan un poco en el olvido. Fátima de Quintana, en su despacho. / Carlos Gil Actividad ganadera P: Además de ejercer como procuradora, también se desempeña como ganadera, gestionando la explotación familiar con la ayuda de su padre. ¿Cómo nace su interés por este oficio? R: La familia de mi padre es de tradición ganadera, por lo que siempre lo vi como algo natural. La finca se encuentra en el término municipal de Esparragosa de Lares, en la comarca de La Serena, ya que mi padre y mi abuela proceden de Campanario. Así que, cuando surgió la oportunidad de complementar mi trabajo como procuradora con esta labor, decidí aprovecharla. Me incorporé como agricultora a título principal y monté una ganadería de ovejas de leche, lo que se conoce como ganado lacón, una raza de origen francés. Trabajo en paralelo con mi padre, que tiene ganado merino, más orientado a la carne. Aunque cada uno gestiona su propia ganadería, cuento con su ayuda en el caso de que surja algún problema, puesto que a diario mi trabajo me obliga a estar en Cáceres. P: Al residir a tantos kilómetros de distancia, ¿cómo se encarga de la gestión del ganado? R: La informática nos ayuda una barbaridad. Hace años monté una sala de ordeño en la finca y tenemos todo informatizado. Me conecto a diario desde mi casa por control remoto y puedo controlar la producción diaria de leche, el número de ovejas que se han ordeñado o las raciones de comida que necesita cada lote de ovejas en función de lo que producen. Además, en la finca tengo a otras dos personas de confianza que ordeñan y atienden el ganado. P: ¿De dónde saca tiempo compaginar ambos trabajos? R: Básicamente, matándome a trabajar. La labor de procuradora me absorbe entre 8 y 10 horas al día, así que procuro acumular el trabajo del ganado para los fines de semana y dejar la actividad de procuradora para los días entre semana. P: ¿Y qué le aporta la vida en el campo que no encuentra en su actividad como procuradora? R: Sobre todo, paz y tranquilidad. Creo que he logrado encontrar un equilibrio muy positivo entre las dos actividades, ya que se complementan perfectamente. Con la evolución de la tecnología, mi trabajo como procuradora me obliga a pasar cada vez más tiempo encerrada entre cuatro paredes, por lo que cuando llega el fin de semana suelo ir al campo para desconectar y cambiar completamente el chip.
Fundación Bancaria Ibercaja C.I.F. G-50000652.
Inscrita en el Registro de Fundaciones del Mº de Educación, Cultura y Deporte con el nº 1689.
Domicilio social: Joaquín Costa, 13. 50001 Zaragoza.
Contacto Aviso legal Política de privacidad Política de Cookies