Se está imponiendo en el mundo vitivinícola la diferenciación selectiva mediante la puesta en valor de distintos conceptos que diferencian el vino: viñedo singular, vino de finca, vino de paraje, vino de parcela, vino de viña, vinos de altura, vinos naturales, vinos de autor, vinos de garaje, vinos de vendimia tardía, vinos de hielo, entre otros. Un caso especial es el concepto de viticultura heroica promovido por el Centro de Investigación, Estudio, Salvaguarda, Coordinación y Valorización de la Viticultura de Montaña (CERVIM), organismo internacional creado en 1987 para defender y promover el cultivo de viñedos en condiciones extremadamente difíciles y en terrenos empinados , generalmente en laderas de montañas o terrazas escarpadas con pendientes del 30%. En estos lugares, la dificultad de acceso, la imposibilidad de usar maquinaria en los viñedos, los bajos rendimientos y las climatologías extremas exigen que los vinos no solo se beneficien de la singularidad del terruño, sino que tengan suficiente calidad como para justificar sus elevados costes. Sin embargo, en Europa solo un 5% de la viña responde a estas peculiaridades. Buenos ejemplos son los vinos procedentes de las colinas de la Toscana en Italia, los viñedos de terrazas en el valle del Duero en Portugal, la Región de Auvergne-Rhône-Alpes en Francia, las laderas empinadas del Mosela en Alemania, o el Valle de Aosta, región del Véneto y la Lombardía en Italia. Pero se puede afirmar sin exagerar que España cuenta con el mayor número de zonas vitivinícolas que cumplen con creces los requisitos exigidos por el CERVIM : Priorat (costers), Ribeira Sacra, Islas Canarias, Sierra de Gredos, Bierzo, Jumilla, Sierras de Málaga, Cangas del Narcea, Arribes del Duero, zonas del Pirineo, entre otras. Como ocurre con otras singularidades, el desafío es convertir las enormes dificultades en grandes oportunidades. Porque el potencial es inmenso, pero los resultados no están todavía al nivel de calidad exigible. Aunque ya contamos con vinos más que notables, en algunos casos incluso sobresalientes. Estos ocho tintos y blancos son la avanzadilla de una escalada que se merece mayor desarrollo y reconocimiento. Puedes seguir a EL PAÍS Gastro en Instagram y Twitter .