Zacarías Fievet lleva a cabo diferentes iniciativas para apoyar la ganadería extensiva, una actividad que ama y que ha vivido en casa desde niño.
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Zacarías Fievet, pastor de vocación y apasionado de la naturaleza.
Foto: @love.whatsurvives
Hay un refrán que dice: 'Ganadero, pecho de acero'. Este es, sin duda, el caso de Zacarías Fievet, un pastor de 28 años de talento y vocación . El joven, proveniente de una familia francesa de ganaderos, es todo un emprendedor que no para de poner en marcha iniciativas que ayuden al sector. "Desde los 18 años me empecé a dar cuenta de los problemas que hay entre las personas que se dedican a esta actividad -expone-. Y en vez de limitarme a criticar, que también lo hago, prefiero buscar soluciones ".
Aunque vive en el valle de Gistau, su actividad se lleva a cabo en todo el Pirineo aragonés. El último proyecto que ha puesto en marcha es el de 'Pastores de Emergencia', junto a otros compañeros autónomos como él. Han creado una página web con el mismo nombre para que todo aquel que lo necesite pueda solicitar sus servicios. "Es increíble, porque nos va estupendamente -relata-. Empezamos en octubre pasado y tenemos ya todo reservado hasta noviembre". Desde entonces, han hecho casi 70 servicios de ganado extensivo y han tenido que rechazar otros 20 porque no llegaban a todo. Por eso, tienen previsto ampliar el número de participantes de cuatro a siete. "Hay gente que está fija, que solo vive de Pastores de Emergencia y hay otros que hacen apoyos puntuales como es mi caso, por ejemplo, en fines de semana, en servicios que no puedan cubrir mis compañeros, etc", explica Fievet.
"Estamos haciendo una labor muy importante, porque mimamos la naturaleza y la conservamos"
Su próximo proyecto , que comenzará en breve, es abrir una pequeña empresa de producción de carne sin antibióticos ni piensos . " Quiero alimentar a los animales con plantas y tratarlos de una manera similar a la que empleo para mí mismo -dice el ganadero-. Me gusta prepararme mis aceites y alcoholes. Prefiero remedios naturales a químicos de farmacia, aunque, por supuesto, que cada uno haga lo que quiera. Las plantas medicinales es algo que funciona. Me lo han inculcado en casa desde que era un crío".
Siempre activo, Zacarías asegura que trabaja en diferentes frentes para que lo que queda de la ganadería extensiva no se extinga . Durante la pandemia, protagonizó el programa de televisión 'Entre Ovejas' en La 1 ; también ha fundado una web 'Tras los pasos del Pastor', en la que comercializa fotografías y organiza exposiciones ; y es, además, uno de los docentes de la Escuela de Pastoreo de San Juan de Plan , que ya ha celebrado tres ediciones. "Hay mucha demanda y más del 50% del alumnado está trabajando", asegura. El perfil de los alumnos es de lo más diverso: este año hay por ejemplo cuatro mujeres y seis hombres, con edades comprendidas entre los 20 y los 60 años , provenientes de Aragón, Valencia, Madrid, Barcelona, País Vasco... "En general es gente que quiere abandonar la ciudad, vivir en el campo y en el monte", resume el pastor, para quien la ganadería extensiva consiste "en aprovechar los recursos de la naturaleza con bajo coste".
El pastor, afincado en Gistau, desarrolla su actividad en todo el Pirineo aragonés.
@love.whatsurvives
Actividad solitaria
En opinión de este experto, hoy en día la ganadería es una actividad solitaria, en contraposición a lo que sucedía antes, cuando en cada casa "había muchos miembros y se ayudaban entre todos . Es una faena que nos está pasando ahora por egoísmo, porque ya no queda gente en los pueblos y porque las familias ya no son grandes".
Fievet prefiere la vida en el campo a la vida de la ciudad. Se define a sí mismo como una persona de buen corazón y muy activista. "Me siento totalmente unido a la naturaleza. Soy naturaleza, igual que el resto de seres humanos, aunque algunos no se dan cuenta", confiesa. Ese sentimiento le hace respetarla y cuidarla. " Los ganaderos somos los conservadores del pasto , donde hay una diversidad que en los bosques, por muy maravillosos que sean, no existe", continúa. Además, dice, son el mejor cortaincendios de la Península : "Estamos haciendo una labor muy importante, porque mimamos la naturaleza y la conservamos para los que vengan el día de mañana".
Zacarías jugó al fútbol hasta los 24 años, pero tuvo que dejarlo para no correr el riesgo de lesiones. "Soy un poco friki -revela-. Me gustan los juegos de mesa, los dados, tomar cervezas con los amigos e ir a las fiestas de alrededor a bailar algún pasodoble. Soy una persona de pueblo". Y así conviven en este ganadero del siglo XXI las aficiones de toda la vida con las más modernas tecnologías que le brinda internet para sacar adelante un sector que ama.
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