La campaña de recolección se adelanta hasta tres semanas en la Marina Baixa, donde la Cooperativa de Callosa d'En Sarrià comercializa casi el 80% de la producción total de nísperos de la Comunidad Valenciana Celebran los agricultores que el tiempo, aunque tan diferente al habitual para estas fechas, está permitiendo que el níspero salga antes al mercado y no compita con otras frutas de temporada como albaricoques, cerezas o melocotones. Pero esa ventaja que le da, sin quererlo, el cambio climático se enfrenta a otros inconvenientes, como explica LA UNIÓ Llauradora i Ramadera. En la Cooperativa de Callosa d'En Sarrià, donde se comercializa entre el 75 -80% de la producción total de nísperos de la Comunitat Valenciana, este año se espera una producción próxima a las 8.000 toneladas frente a las 11.000 habituales. En general, en el conjunto de las zonas productoras de la Comunitat Valenciana habrá alrededor de 10.000 toneladas, lo que representa un descenso del 30% sobre la pasada campaña (14.000 toneladas) como consecuencia, advierten, de las adversidades meteorológicas, principalmente por la falta de lluvias. La ausencia de precipitaciones ha traído también una bajada del calibre, aunque apunten que, en positivo, esto ha generado que la calidad y cualidades organolépticas del fruto sea este año "excepcional". A la buena calidad que pregonan se sumará este año un precio más alto, pues en comparación con la campaña anterior ha habido un aumento de precio del 50%. Por su parte, Carles Peris, secretario general de LA UNIÓ, indica que es "fundamental seguir cultivando nísperos en la Marina Baixa y otras zonas para que los consumidores de la Comunitat Valenciana puedan seguir disfrutando de nísperos del territorio que gozan de una gran calidad". Con todo, los agricultores explican que este incremento no ha repercutido en los ingresos de los productores y apuntan que los costes de producción siguen al alza y uno de los más importantes es el laboral: solo en la zona de Callosa d'En Sarrià se necesitan entre 500 y 1.000 jornaleros por campaña. Asimismo, Peris afirma que "se trata de un producto que tiene un coste de producción elevado por su manejo agronómico tan cuidado que requiere de tareas manuales como el aclarado para obtener un calibre adecuado, una recolección cuidadosa y un posterior encajado manual. Todo ello es motivo suficiente para que tenga un precio suficiente y justo en los lineales para compensar todo este proceso". El Alto Palancia ha perdido en una década el 90% de las plantaciones de nísperos Según LA UNIÓ, en estos últimos días de abril está prácticamente recolectado, en la zona de la DO de Callosa d'En Sarrià, casi el 75% de la producción, por lo que se espera que a mediados de mayo esté ya todo cosechado. Falta la otra zona productora, el Alto Palancia, donde hay plantaciones en Segorbe, Castellnovo y Soneja. Aquí, advierten, habrá una producción "normal y con buen calibre". Sin heladas, la fruta presenta un "excelente" y la falta de precipitaciones ha evitado los problemas fitosanitarios. En junio será la cosecha en esta segunda zona del níspero en la Comunidad Valenciana, donde advierten la producción es residual por el alto abandono de los campos. Alertan que en los últimos diez años la comarca ha perdido casi el 90% de las plantaciones existentes.