INFORMACIÓN ACERCA DE LAS COOKIES UTILIZADASLe informamos que en el transcurso de su navegación por los sitios web del grupo Ibercaja, se utilizan cookies propias y de terceros (ficheros de datos anónimos), las cuales se almacenan en el dispositivo del usuario, de manera no intrusiva. Estos datos se utilizan exclusivamente para habilitar y estudiar de forma anónima algunas interacciones de la navegación en un sitio Web, y acumulan datos que pueden ser actualizados y recuperados. En el caso de que usted siga navegando por nuestro sitio Web implica que acepta el uso de las cookies indicadas. Puede obtener más información, o bien conocer cómo cambiar la configuración, en nuestra sección Política de cookies


Menos guisante y más alberjón: los agricultores apuestan por un nuevo cultivo más rentable

01/02/2018
En: eleconomista.es
Digital
Un total de 2.100 hectáreas se han sembrado de alberjón en Castilla y León y la superficie va creciendo. La razón no es otra que los productores tradicionales de guisantes se están pasando a esta leguminosa que les ofrece más producción, menos enfermedades y más resistencia ante el frío y la sequía. Más noticias en la revista gratuita elEconomista Agro "Los problemas de los guisantes con la bacteriosis hicieron que buscásemos una alternativa autóctona proteínica a este cultivo y apostamos por el alberjón", explica a elEconomista Agro Urbano Blanco, de la cooperativa palentina Agropal, que impulsa un proyecto para extender este cultivo entre sus asociados Es el caso de Luis Fernando Cantero, agricultor en Antigüedad (Palencia), que lleva tres años con este cultivo. "He sustituido el guisante por el alberjón en mi explotación principalmente porque me exige menos tratamientos, es más fácil de cosechar y es más resistente al hielo y a las bajas temperaturas que el guisante, que es más delicado". En España, tradicionalmente, se ha cultivado como leguminosa grano para alimentación animal en Castilla-La Mancha, Extremadura y Andalucía y en la mayoría de los casos, en condiciones de marginalidad y áridas. Hasta 1.500 kilos por hectárea Las ventajas que ofrece este cultivo frente al guisante son varias. La primera es la productividad porque "siempre sacas algo más que el guisante". Un año normal puede estar en torno a los 1.000-1.500 kilos por hectárea y uno bueno rozar los 2.000-2.600 kilos por hectárea", comenta Cantero. Con un precio parejo al del guisante, entre los 280 y 360 euros por tonelada, son muchos los que comienzan a contemplar esta alternativa. Otro beneficio con el que cuenta esta leguminosa con respecto al guisante, es que no le ataca insectos como el pulgón, por lo que no requiere de uso de insecticidas. "Tiene la ventaja de que esta plaga no le afecta, lo siembras y te olvidas. Solamente tienes que aplicar un sellante para las malas hierbas al igual que el guisante y nada más", explica Cantero. La época de siembra ideal en Castilla y León, comunidad autónonoma donde se está implantando más gracias al proyecto desarrollado por Agropal, y en el resto, es el otoño. Fundamentalmente los meses de octubre, noviembre y diciembre porque si se siembra en primavera la producción desciende. El manejo no presenta ninguna característica especial. Es sencillo y prácticamente igual que el del guisante, lo que facilita el cambio. Tampoco necesita de ninguna maquinaria específica. La siembra y la recolección se realizan con las máquinas tradicionales destinadas al cereal. Otro aspecto muy valorado en este cultivo es la cosecha. Gracias a su tallo alto y erecto la recolección es muy sencilla. El auge de este cultivo también tiene que ver con el destino final. Utilizado para alimentación animal como fuente de proteína, los ganaderos están empezando a introducirlo en las raciones que dan a sus animales en detrimento de la soja que es más cara. "Frente a nuestra dependencia exterior de la soja, que importamos mayoritariamente, tenemos la alternativa del alberjón, un cultivo autóctono que proporciona a nuestros ganaderos la proteína necesaria, a la vez que reducen el gasto en alimentación de su cabaña", comenta Urbano Blanco. Los conejos no lo comen Este cultivo también esta funcionado muy bien como solución a los problemas de muchas zonas de España con plagas de conejos y otra serie de fauna. "No sabemos la razón, pero los conejos que tantos daños causan a muchas explotaciones, no se comen este cultivo", comenta Blanco. Esta característica particular del alberjón también está favoreciendo su expansión en Castilla y León como remedio ante una problemática muy extendida en algunas zonas. "No te tienes que preocupar de que ningún animal te merme la producción, no solo funciona con los conejos, también con jabalíes, corzos y venados que ignoran absolutamente este cultivo frente a otros que prácticamente devoran", explica Luis Fernando Cantero. La única preocupación a tener en cuenta con este cultivo es un exceso de lluvia muy continuado en el tiempo que puede provocar la aparición de hongos. Una situación, no muy habitual donde predomina lo contrario y cada vez más tendencia a registrar años secos, pero que excepcionalmente se puede dar como pasó en el año 2016, lo que provocó un ataque del mildiu que mermó las producciones. El encharcamiento es uno de sus limitantes. No soportan el exceso de humedad. Ante tales condiciones, las habas o los guisantes presentan una mayor adaptación. Sin embargo, su tolerancia a las bajas temperaturas hace posible su cultivo en zonas donde no es viable el de estas otras leguminosas. En cuanto al manejo de las malas hierbas, hay que tener las mismas precauciones que con el guisante. Tanto el alberjón como el resto de leguminosas tienen el problema de que hay pocos herbicidas autorizados para estos cultivos. El alberjón es una buena alternativa en la rotación de cultivos porque a su rentabilidad hay que sumarle otros beneficios. Este cultivo mejora la fertilidad y estructura del suelo, aportando nitrógeno, reduciendo la compactación y mejorando la infiltración de agua. El alberjón es otro de los cultivos que se ha visto beneficiado con la entrada en vigor del Greening o pago verde de la PAC, ya que cumple con todos los requisitos como opción ideal dentro de la diversificación de cultivos necesaria, a la que obliga la nueva Política Agraria Común. "Para mí", comenta Luis Fernando Cantero, "es un cultivo muy recomendable, porque da más kilos que el guisante, es más rústico y no tan delicado como él y te ahorras tratamientos". "Yo particularmente desde que aposté por el alberjón no he vuelto a sembrar de nuevo guisantes", comenta este agricultor palentino.
Fundación Bancaria Ibercaja C.I.F. G-50000652.
Inscrita en el Registro de Fundaciones del Mº de Educación, Cultura y Deporte con el nº 1689.
Domicilio social: Joaquín Costa, 13. 50001 Zaragoza.
Contacto Aviso legal Política de privacidad Política de Cookies