En el Principado se fabrican 329 diferentes de este lácteo, pero los más preciados son estas tres joyas de la corona, ideales para comer en Navidad El mejor restaurante mexicano de Asturias es este y fliparás con su guacamole Trescientas veintinueve variedades de queso se fabrican en Asturias, algo así como el país de los quesos y de todas ellas hay tres que no puedes dejar de probar. Sin querer menospreciar a ninguna de las elaboraciones, lo cierto es que hay tres lácteos que son los más reconocidos, valorados y preferidos por quienes aman este producto. Además son perfectos para servir en estas fechas e incluso para regalarlos, si dudas sobre qué regalar a alguien seguro que con uno de estos quesos siempre aciertas. Te desvelamos el secreto de las tres joyas de la corona y te explicamos el porqué de su enorme fama. ¿Se la merecen? Seguro que sí. Queso Cabrales. El clásico de los clásicos, pero que nunca falla. El más conocido de todos los quesos que se elaboran en Asturias. Se usan tres leches para poder elaborarlo, vaca, cabra y oveja. Se trata de un queso azul de sabor potente que cuenta con el sello de calidad de Denominación de Origen Protegida. Su producción se limita al concejo de Cabrales, en plenos Picos de Europa, y de ahí, su nombre. Se elabora de forma totalmente artesanal, y es el Consejo Regulador el que se encarga de velar porque se cumplan todas las normas y requisitos para garantizar que todos los quesos Cabrales sean artesanales, únicos y que se curen en cuevas naturales. El peso de un queso Cabrales oscila entre los dos y los cinco kilos. Se puede untar y es muy utilizado para hacer salsas que se usan como acompañamiento de carnes, en Asturias son muy famosos los escalopines al Cabrales y también se usa bastante con patatas o con algunos cachopos. El último domingo del mes de agosto se celebra en Arenas de Cabrales, el certamen de este queso que puedes comprar en muchas tiendas y supermercados ya que es mundialmente conocido. Son los pastores de Picos de Europa quienes siguen manteniendo la tradición y la receta para elaborar este queso. Gamonéu, el más caro del país. Los amantes del queso adoran el Gamonéu, se trata de un queso muy graso, con corteza natural y muy madurado, que se elabora con leche de cabra, vaca y oveja y que está ligeramente ahumado. No es un queso azul y no tiene nada que ver con el Cabrales. Es un auténtico lujo comerlo y hay dos versiones, el del Valle y el del Puerto. Su "apellido" depende del lugar en el que se madure. Hay cuatro productores dentro de la Denominación de Origen Protegida. Su elaboración es milenaria y hoy son muy pocos los queseros que siguen apostando por él. La curación se hace en las cuevas de los puertos de montaña y tiene un sabor que no podrás comparar con ningún otro. Cien por cien artesanal, desde el ordeño, que se hace a mano, hasta que lo ves en la tienda. La leche cruda de mezcla de vaca parda alpina, cabra mantrina de la zona y oveja carranzana le confiere una textura y un sabor absolutamente mágico. Ahumado de Pría: Nada que ver con los anteriores, se trata de un queso menos intenso pero con un sabor muy especial por su ahumado. Una auténtica delicia que no te puedes perder y que se trata de una especialidad elaborada con leche de vaca y nata de suero de oveja. Ahumado naturalmente con madera de haya o de roble. Su sabor recuerda a algunos quesos holandeses que también están ahumados, pero este producto asturiano tiene un toque especial, diferente. Un ligero punto picante que le da un sabor absolutamente único. Es uno de los que más se consumen y que además es apto para todos los paladares, ya que su sabor es menos fuerte que los anteriores. Es un queso muy consistente, no tiene agujeros, porque está prensado. Su nombre hace homenaje a su lugar de elaboración, Pría, en el concejo de Llanes. Se utiliza mucho para rellenar cachopos, y hace un matrimonio perfectos con uvas, nueces, miel, ensaladas... No puedes dejar de probarlo porque es uno de los quesos más ricos de Asturias y que se sale de los sabores más clásicos.