El sector agrario encara una nueva subida de costes con un encarecimiento de las pólizas de los seguros del 27% en el último trienio y con el nivel de siniestralidad alcanzando cifras históricas. Primero fue Filomena, luego la sequía y el cambio climático. Toda esta situación ha hecho que el recibo de las primas haya pasado en total de 797,8 millones de euros en 2020 a 1.011 millones el año pasado, según los datos del último informe de Agroseguro. Tan solo en 2023 la subida es del 16%. Y, mientras, la siniestralidad ha alcanzado los 1.241 millones, una cifra nunca vista . Es un 55% más respecto al último récord, que se alcanzó en 2018. La mayor parte de las in demnizaciones corresponden a la sequía, sobre todo durante el primer semestre del año, que asoló a los cultivos de secano, con compensaciones por un total de 496 millones . Le siguen de cerca las borrascas, con 375 millones, y las heladas, con 61 millones más. Son fenómenos metereológicos que golpearon a 3,5 millones de hectáreas y que lastraron la productividad del campo. Los herbáceos, la uva de vino, los frutales, las hortalizas y los olivares fueron los cultivos más afectados, sufriendo un encarecimiento de los precios. Más seguros Los seguros agrarios tienen un funcionamiento público-privado y están subvencionados, en gran parte, por las Administraciones Públicas, tanto nacionales como autonómicas. Ante el cambio climático y la sequía, el importe que cubre la Administración ha ido creciendo en los últimos años. "En 2014 el porcentaje de subvención sobre el recibo de prima era de aproximadamente un 40%, mientras que en 2023 este mismo porcentaje se ha elevado hasta un 50%. Esto significa que de los más de mil millones con los que hemos cerrado el ejercicio pasado, los asegurados han tenido que afrontar el pago de unos 500 millones de euros, mientras que el sistema ha devuelto 1.241 millones de euros en siniestralidad", explican desde Agroseguros. Los agricultores, sin embargo, no piensan igual. Desde Coag apuntan, de hecho, que "el dinero recibido del Ministerio ha disminuido y las ayudas de las autonomías son escasas" . En 2023, hubo en total 178.763 siniestros agrícolas y se aseguraron casi seis millones de hectáreas y 36,9 millones de toneladas de cultivo. El sector necesita blindarse ante los fenómenos adversos y, de cara a este año, se espera que la cifra sea incluso mayor. "El campo español estará en 2024 más asegurado que nunca en la historia", señala el director general de Agroseguros, Sergio de Andrés. El capital asegurado sigue la misma senda y acumula ya nueve años consecutivos de subidas. Ahora bien, no todos los cultivos se protegen de la misma manera. Los agricultores han optado por asegurar, sobre todo, hortalizas (+12%), frutales (+9%), cítricos (+3%) y uva de vino (+3%). Cambios en el sistema Desde hace semanas el campo español se ha movilizado a raíz de la crisis del sector y por las políticas agrarias . Los elevados coste de producción, las cargas burocráticas y los recortes en las subvenciones, son algunos de los motivos que han llevado a los agricultores a las calles. El sector agrario reclama, entre otras cosas, una reforma de los seguros que cubran los daños de catástrofes derivadas del cambio climático. "Es un tema complejo y, aunque haya habido avances en los últimos años, los seguros se están encareciendo", explican desde Coag. Además, resaltan que "la siembra se asegura en plena campaña, cuando todavía no sabes si va a ser rentable. Los agricultores asumen un coste que ronda los 14.000 euros". Además, existe un debate interno sobre la posibilidad de implantar un seguro de renta. "El problema es que el mercado es muy volátil", explican desde Coag.